Compendio de la filosofía: 65
QUESTION SEGUNDA.
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Verdaderamente no debe serlo; y esto por dos razones, de las quales la primera es esta. La virtud es un hábito, que se adquiere con el exercicio y por uso; es así que la benevolencia y la amistad no se adquieren de este modo, pues no se dice jamas, que uno quiera bien al amigo, porque se haya exercitado en esto, y haya hecho costumbre, sino por otra causa: luego la amistad no es virtud.
La segunda razon es esta. Siendo la amistad recíproca, no está toda en aquel que la tiene, sino que parte está en él, y parte está fuera de él: así la amistad que tiene Lelio con Scipion, no está toda en Lelio, sino parte en Lelio y parte en Scipion; y así tambien sucede en todas las cosas que consisten en relacion y recíproca correspondencia. Siendo, pues, cierto, que la amistad no está toda en aquel que la tiene, sino que en parte está fuera de él, parece ciertamente que no deba decirse virtud; pues la virtud está toda en aquel que la tiene; esto es, en el virtuoso, el qual no lo sería, ni se llamaria virtuoso, si la virtud no estuviese en él enteramente, sino solamente en parte.
Concluyamos, pues, que la amistad no es virtud; y si ella es una cosa honestísima, como ciertamente lo es, y digna de grandísima alabanza, de suerte, que parece muy semejante á la virtud, esto acontece, porque los oficios de la amistad son virtuosos, debiendo el amigo exercitar muchas veces para con el otro amigo la liberalidad, la justicia, la jovialidad, la cortesía, sin las quales virtudes no podria subsistir la amistad. Y aun tambien por esto se prueba, que la amistad no se deba agregar al número de las virtudes, no siendo ella una virtud particular, sino mas bien una particular disposicion, que casi las abraza y las comprehende todas. Por esto dixo bien Aristóteles, que la amistad, ó es virtud, ó está con la virtud; en donde, aunque parece que dexa algun lugar á la duda, da bastante á entender, que él no tuvo á la amistad por virtud por el mismo hecho de haber dudado; fuera de que él trató largamente de la amistad, no en aquel lugar en que de propósito se pone á explicar las virtudes, sino en otra parte.