Autor:Julio Herrera y Reissig
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Julio Herrera y Reissig (9 de enero de 1875 - 9 de marzo de 1910) Poeta uruguayo. |
Todas las obras originales de Julio Herrera y Reissig se encuentran en dominio público. Esto es aplicable en todo el mundo debido a que falleció hace más de 100 años. Las traducciones de sus obras pueden no estar en dominio público.
Obras
editar- Canto a Lamartine (1898)
- Epílogo wagneriano a "La política de fusión" con surtidos de psicología sobre el Imperio de Zapicán (1902)
- Las pascuas del tiempo (1902)
- Los maitines de la noche (1902)
- La vida (1903)
- Los parques abandonados (1902-1908)
- Los éxtasis de la montaña (1904-1907)
- Sonetos vascos (1908)
- Las clepsidras (1909)
- La torre de las esfinges (1909)
- Los peregrinos de piedra (1909)
- La torre de marfil
- Poesías completas (1913, póstuma)
- Ópalos. Buenos Aires: Ediciones selectas América. 1919. A transcribir
Poesías
editarEn orden alfabético, se indica en cursiva el primer verso.
- Desolación absurda (Noche de tenues suspiros)
- El canto de las horas (Aramís ordena que los doce Meses)
- El canto de los meses (Aramís ordena que los danzarines)
- Fiesta popular de ultratumba (Un gran salón. Un trono. Cortinas. Graderías.)
- La gran soirée de la elegancia. La danza de los meses y de las horas. Galanterías eternas (Decoración: La sala semeja una floresta)
- Llegada de los meses y de las horas (Saludando cortésmente a la buena Mamá Juno)
- Numen (Mefistófela divina,)
- Recepción instrumental del gran polígloto Orfeo (Entra el viejo Orfeo. Mil notas auroran)
- Su majestad el tiempo (El viejo Patriarca)
- Terminación de la fiesta. Despedidas y quejas. Llueve. Desfile de la concurrencia (Suenan galanteos y besos y adioses:)
- Tertulia lunática (En túmulo de oro vago)
Sonetos
editarEn orden alfabético, se indica en cursiva el primer verso.
- Amor sádico (Ya no te amaba, sin dejar por eso)
- Bostezo de luz (Cien fugas de agua viva rezan a la discreta)
- Bromuro (Burlando con frecuencia el vasallaje)
- Buen día («Do re mi fa» de un piano de vidrio en el follaje)
- Canícula (Labora la coqueta falange rusticana)
- Claroscuro (En el dintel del cielo llamó por fin la esquila.)
- Claroscuro (II) (Son campos solariegos... Tal vez, ay! ese muro)
- Consagración (Surgió tu blanca majestad de raso,)
- Decoración heráldica (Soñé que te encontrabas junto al muro)
- Dominus vobiscum (Bosteza el buen Domingo, zángano de semana...)
- Ebriedad (Apurando la cena de aceitunas y nueces,)
- El abrazo pitagórico (Bajo la madreselva que en la reja)
- El alba (Humean en la vieja cocina hospitalaria)
- El almuerzo (Llovió. Trisca a lo lejos un sol convaleciente,)
- El ama (Erudita en lejías, doctora en la compota)
- El ángelus (Salpica, se abre, humea, como la carne herida,)
- El baño (Entre sauces que velan una anciana casuca,)
- El burgo (Junto al cielo en la cumbre de una sierra lampiña,)
- El consejo (El astrónomo, el vate y el mentor se han reunido...)
- El cura (Es el Cura... Lo han visto las crestas silenciarías,)
- El despertar (Alisia y Cloris abren de par en par la puerta)
- El dintel de la vida (Oh, la brega que jacta de viruta y de pieles!...)
- El domingo (Te anuncia un ecuménico amasijo de hogaza,)
- El entierro (Cuatro rudos gañanes, sobre el hombro herculoso)
- El espejo (Se hunden en una sorda crisis meditabunda...)
- El genio de los campos (Por donde humea el último arado en los cultivos,)
- El guardabosque (La mesnada que aúlle o la sierpe se enrosque,)
- El labrador (Cual si pluguiese al Diablo -vaya un decir- engorda)
- El monasterio (A una menesterosa disciplina sujeto,)
- El regreso (La tierra ofrece el ósculo de un saludo paterno)
- El secreto (Se adoran. Timo atiende solícita al gobierno)
- El teatro de los humildes (Es una ingenua página de la Biblia el paisaje...)
- Epitalamio ancestral (Con la pompa de brahmánicas unciones,)
- Exhalación suprema (Bajo el regio crepúsculo de oro azul y grosella,)
- Éxtasis (Bion y Lucina, émulos en fervoroso alarde,)
- Fecundidad («¡Adán, Adán, un beso!», dijo, y era)
- Fiat lux (Sobre el rojo diván de seda intacta,)
- Galantería ingenua (A través de la bruma invernal y del limo,)
- Génesis (Los astros tienen las mejillas tiernas...)
- Idealidad exótica (Tal la exangüe cabeza, trunca y viva,)
- Idilio (La sombra de una nube sobre el césped recula...)
- Idilio espectral (Pasó en un mundo saturnal; yacía)
- Iluminación campesina (Alternando a capricho el candor de sus prosas,)
- Invierno (El invierno embalsama, con sugestión de faustos)
- Julio (¡Frío, frío, frío!)
- La casa de Dios (Flamante con sus gafas sin muchos retintines,)
- La casa de la montaña (Ríe estridentes glaucos el valle; el cielo franca)
- La cátedra (De pie, entre sus discípulos y las torvas montañas,)
- La cena (Un repique de lata la merienda circula...)
- La dicha (Todas -blancas ovejas fieles a su pastora-)
- La escuela (Bajo su banderola pertinente, la escuela)
- La estrella del destino (La tumba, que ensañáse con mi suerte,)
- La flauta (Tirita entre algodones húmedos la arboleda...)
- La granja (Monjas blancas y lilas de su largo convento,)
- La huerta (Por la teja inclinada de las rosas techumbres)
- La iglesia (En un beato silencio el recinto vegeta.)
- La llavera (Viste el hábito rancio y habla ronco en voz densa;)
- La misa cándida (¡Jardín de rosa angélico, la tierra guipuzcoana!)
- La noche (La noche en la montaña mira con ojos viudos)
- La procesión (El señor Cura, impuesto de sus oros sagrados,)
- La siega (La mocedad que acude, briosa, de las campañas,)
- La siesta (No late más un único reloj: el campanario,)
- La sombra dolorosa (Gemían los rebaños. Los caminos)
- La velada (La cena ha terminado: legumbres, pan moreno)
- La vendimia (Mordiscan las tijeras con apáticos mimos,)
- La vuelta de los campos (La tarde paga en oro divino las faenas...)
- La zampoña (Lux no alisa el corpiño, ni presume en la moña;)
- Las horas graves (Sahúmase el villaje de olores a guisados;)
- Las madres (Verde luz y heliotropo en los amplios confines...)
- Los carros (Mucho antes que el agrio gallinero, acostumbra)
- Los perros (El olivo y el pozo... Dormida una aldeana)
- Meridiano durmiente (Frente a la soporífera canícula insensata,)
- Neurastenia (Huraño el bosque muge su rezongo,)
- Nirvana crepuscular (Con su veste en color de serpentina,)
- Otoño (La druídica pompa de la selva se cubre)
- Panteo (Sobre el césped mullido que prodiga su alfombra,)