Nota: En esta transcripción se ha mantenido la ortografía original.

MOLINISTAS.


«Sistema contradictorio del de los jansenistas, que es el que prevalece» -Pues que jansenistas en el guirigai de los antifilósofos, segun que arriba dijimos, es lo que castellanamente llamamos cristiano rígido; en mostrando el revés de la medalla, cata vivita la imágen de un molinista. Los molinistas, pues, vienen á ser una especie de embelecadores que jugando al pasa pasa con la ley de J. C., para todo encuentran absolvederas. Ademas de esta significacion lata tiene este vocablo otras dos propias y genuinas, de que voy á hacer una pequeña reseña; para que se vea que miéntras haya teólogos en el mundo, no hacen falta los filósofo para corromper la moral y aun el moral.

Primeramente. se llaman molinistas los sectarios del P. Luis Molina de la Compañía de Jesús, el cual heregeó diabólicamente en materias de gracia. Si se me pregunta ¿de cual gracia? respondo peladamente que no lo sé, ó no me acuerdo, que para el caso es lo mismo. ¡Verdaderamente que hay tantos géneros de gracia! Hay gracia gratisdata, hayla eficaz, la hay suficiente, medicinal, operante, concomitante, gracia versátil, gracia... Ultimamente yo no sé en cual prevaricó Molina; pues aunque todas estas gracias las conozco de oidas, y aunque creo y venero como católico cristiano todas las que no, huelan á chamusquina; yo, fuera sea la de Dios, no entiendo de otra gracia, que la encantadora de que ha dotado el cielo á cierta gentil personita y que yo me digo para mi plaopianino.

Molinista ademas (ó mas propiamente molinista) es sinónimo de quietista. No se me arroje de súbito algún lector lego á creer que estos tales quietistas sota acaso individuos del famoso regimiento del Posma, en cuya escuela militar parece que han estudiado la táctica algunos de nuestros caudillos. Estos otros quietistas son todavia peores. Llamanse asi el Dr. Molinos, su gefe y cabeza, clérigo aragonés que vivió algun tiempo en Roma cosagrado á la direccion de conciencias. Este ministerio, que ejerció con predileccion en aquella parte mas débil del rebaño del Señor, á que los profanos modernamente llamamos bello-sexo, le desempeñó nuestro rabadan con notables aumentos de la cristiandad.

Fué el caso que se dió á la vida contemplativa en términos que se abstraia del cuerpo como si fuese un espíritu puro; y fuese bien dejado de la gracia del Criador, ó llevado de la de sus Criaturas, él fué de hito en hito sin parar hasta que cayó en una rara tema: persuadióse que estando el alma quieta en Dios, importa un bledo que el cuerpo esté con quien quiera. Y luego empezó á sembrar esta doctrina, de que recrecieron muy colmados frutos á la viña del Señor, en la forma que arriba insinuamos bajo otra metáfora, porque esto no se puede hablar de otra suerte. Sin embargo, me esplicaré un poquito mas.

Digo pues, que el demonio como es tan travieso, viendo la suya, cogió, y ¿que hizo? agarróme al Dr. espiritual por aquella parte flaca, por donde mollean todos los grandes-hombres: de manera que habiendosele trasteado la vida con motivo de los innumerables embarazos que resultaban de su doctrina, se descubrió que el cuerpo de nuestro buen varon habia hecho de las suyas largo y tendido, aprovechandose de los eclipses de alma que el siervo de Jesus habia tenido con las siervas de María en sus ejercicios de oracion y meditacion. Yo no sé que hechizo particular tenia el buen P. Molinos para insinuar su molinismo, que sus hijas de confesion se pelaban por él los dedos: tanto se propagó, que á pesar de las censuras que se fulminaron contra él y el libro en que se enseña [1]; no se pudo acabar de estinguir, y así continuamente está renaciendo bajo diferentes formas. En nuestros dias ha aparecido bajo la de los solicitantes en confesion, raza ratera de gerifaltes que aun por entre rejillas echan la garra a las cándidas palomas: por señas que en Cádiz anida un pajarraco de estos que despues de haber estado enjaulado en la casa-negra, ahora la defiende con garra y pico; y... no digo mas: él me entiende, enmiendese, y no quiera deslumbrarnos con la luz brillante de su pluma, galana.


  1. GUIA ESPIRITUAL que desembraza el alma, y la conduce al interior camino para alcanzar la perfecta contemplación: por el Dr. Miquel Molinos. -Zaragoza, 1677.