Cancionero (Petrarca)/Surca mi nave llena del olvido
Surca mi nave llena del olvido
mar crudo a media noche y en invierno,
y entre Escila y Caribdis la gobierno
con señor que enemigo mío ha sido.
En cada remo un pensamiento anido
que el fin y el temporal tiene por tierno;
la vela hiende un viento húmedo eterno
de esperanza, de deseo, de gemido.
Lluvia de llanto, bruma de desvío
la fatigada jarcia baña y parte
que retorcida del dolor se exhibe.
La luz se oculta ya del faro mío;
tan muerta entre razón y ondas y arte
que dudo que haya vez que a puerto arribe.