Cancionero (Petrarca)/Áspero corazón y cruel antojo
Áspero corazón y cruel antojo
en dulce, humilde, angélica figura,
si el usado rigor gran tiempo dura,
tendrán al fin de mí pobre despojo;
que, al nacer o morir flor o matojo,
ya sea día claro o noche oscura,
lloro; y del bien de Amor, de mi ventura
y mi sola señora me acongojo.
Mas vivo esperanzado, recordando
que gota a gota el agua en tiempo grande
desbasta jaspe y piedra más gallarda.
Tan duro corazón no hay que llorando,
rogando, amando, a veces no se ablande,
ni apetito tan frío, que no arda.