Tu cuerpo

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Desde el prodigio de tus pies menudos

hasta el milagro de tu blondo pelo,

tus contornos, turgentes y desnudos,

fingen una visión tallada en hielo.


Una visión de soberana diosa

en que todo supera al arte griego,

desde tus plantas de color de rosa

hasta tus rizos de color de fuego.


¿En dónde están los mágicos cinceles

que tallaron perfectas esculturas?

¡Oh Fidias inmortal, oh Praxiteles!


Dejad vuestras sagradas sepulturas

y venid a arrojar vuestros laureles

ante la más cabal de las hechuras!