Escena IV

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REPÓRTER.- (Por la lateral.) ¿Y, mi comisario?

COMISARIO.- Todo descubierto. No ha acabado de confesar pero ya cantará.

REPÓRTER.- ¿Moneda Falsa?

COMISARIO.- Claro que sí. Investigaciones está empeñada en que hay «pesci grosi». No saben nada. Y ustedes tienen la culpa. Puro bombo a investigaciones, sin pensar que casi todas las pesquisas son nuestras. Y claro está. Nosotros somos los más habilitados para conocer a las gentes y costumbres de nuestros vecindarios; los tenemos en la palma de las manos.

REPÓRTER.- Espero que nosotros tendremos la exclusividad de la noticia. Nuestro diario ha hecho méritos ya y...

COMISARIO.- ¡Oh! Pierda cuidado. ¿Quieren publicar el retrato del sujeto? Ahí tienen la ficha antropométrica. Vea qué lista (leyendo.) Antonio Almada (alias) Moneda Falsa, o Antonio o Almada. Entradas (vea qué cosa). Ficha tal, 9 años, primera entrada, circular moneda falsa; 2ª y 3ª... Vea, ahí tiene la chorrera. ¡Ah! Debo decirle como antecedente curioso, que nunca se le ha podido probar nada... Unos meses en 24 y a la calle para volver en seguida. Tiene una cara de idiota y unas exterioridades que engañan, pero es habilísimo.

REPÓRTER.- Perfectamente. Me llevo la ficha. Y me voy porque es tarde.

COMISARIO.- Espero que no nos olvidará... No por mí, sino por los muchachos. Es un estímulo.

REPÓRTER.- ¡Oh! A ese respecto... Hasta luego. Espero que habrá noticias decisivas.

COMISARIO.- ¡Con toda seguridad!...

REPÓRTER.- Chao... (Mutis.)