Escena VI editar

VASQUITO.- Buenas tardes.

CARMEN.- Buenas.

VASQUITO.- ¡No compra nada, hoy!

CARMEN.- ¡Andá! ¡Tenés una yeta!

VASQUITO.- También usted quiere sacar en todas. Vea que decena tengo en esta jugada (Saca unos billetes de lotería y se los enseña, diciéndole en voz baja.) Pibe está en cana.

CARMEN.- (Con sorpresa.) ¡Qué! ¿Cómo sabés?

MONEDA.- (Id.) ¿Ande lo encanaron?

VASQUITO.- En la casa.

MONEDA.- ¡Pucha digo, que son!...

LUNGO.- (Que ha observado la escena, acercándose.) Novedad.

VASQUITO.- ¡Yo pianto! Pibe en cana.

LUNGO.- ¡Y bueno, ese no bate!...

VASQUITO.- ¡No sabés!... Y hay mayorengo en la puerta. Yo pianto te digo.

LUNGO.- ¡Y lo vamos a dejar al gil así no más! Vos no piantas, ¿sabés?

VASQUITO.- Mirá que tengo pase, y si me lo quitan.

MONEDA.- ¡Que son! ¡Dejalo que se vaya! ¡Piantamos todos, hombre! ¡Pucha!

BATIFONDO.- ¡Ché Vasquito!... Atendé un momento. ¿Tenés el extracto de la pasada? Sos muy yetudo. Si no saqué no te compro más.

LUNGO.- (Obligándolo.) Andá, sacá el cartel, ¡Seas otano!...

VASQUITO.- ¡Ahí lo tiene; revise don Tranquilidad!

BATIFONDO.- Avisá si estás escabiao. (Saca un billete de lotería y revisa prolijamente el extracto.)

GAMBERONI.- (A Pedrín.) ¡Ebé! ¡Questo de la lotería mi pare una inmoralitá; una vera inmoralitá! ¿Parlo bene o parlo male?

PEDRÍN.- Parlate bene. Ma di cuando en cuanto si pué gioccare cinque pesi. Ma ahora mi recordo que tengo in tasca un biglieto da cinquenta mile e no lo son visto ancora. Non ho avuto il tempo.

GAMBERONI.- ¡Oh! Che tempo... ¡Atre mesi!...

BATIFONDO.- No, dije; ni medio, (al Vasquito.) ¿Usted quiere ver el extracto dice?... ¿Tiene número? Diga qué número. Traiga.

PEDRÍN.- Scusí. Ma...

BATIFONDO.- ¡Cha, que sos desconfiao! ¡Velo vos si querés!

PEDRÍN.- Io non poso. No so leggere. Ma scusi il mio paisan.

BATIFONDO.- ¡Salí de ahí desconfiao! Ché, Gamberoni... Mirale el billete a ese.

GAMBERONI.- ¡Como nó! Vediam (Revisando) Cinquemile tresento trentuno... Cinque mile. Cinque mile cento. Cinque mile trecento... ¡Guarda! guarda... E Paisan. ¡Evviva Italia! ¡Padrona! Un altro volta qui paga el mío paisan.

PEDRÍN.- ¡Cosa avete! ¡Cosa avete!

GAMBERONI.- ¡Siete un cane!... ¡Cinque cento pezi... Madona! ¡Pezzo d'un asino. Cinque cento!...

LUNGO.- ¿Y qué vas a hacer con tanta plata, gringo? Te vas a Italia.

PEDRÍN.- ¿Ma cosa dite?

BATIFONDO.- Que te has sacao quinientos pesos, cinque cento pesos en la lotería.

PEDRÍN.- ¡Oh, Christo! ¡Davvero!

GAMBERONI.- ¡Ma sí! ¡Ma sí!... Madona que siete un asino... Vedi... (Mostrándole el extracto.)

PEDRÍN.- Ma io non so leggere...

GAMBERONI.- ¡Vi lo dico io, Gamberoni, e basta!

PEDRÍN.- ¿Ma cosa faccio io con cuesto numero?

BATIFONDO.- Lo cobrás. En cualquier agencia. ¿Vos tenés con qué pagarle, Vasquito?

VASQUITO.- ¡Avisá!

PEDRÍN.- Ma io non conosco la cittá e debo andare via adeso.

LUNGO.- Pucha, italiano otario, ¡Si yo tuviera! ¡A ver, a ver!... A mí no me alcanza; no tengo más que catorce pesos. Ché, Napoleón.

GAMBERONI.- Cicilio.

LUNGO.- Es lo mismo. ¿Tenés plata, vos?

GAMBERONI.- ¿Per pagare cuesto?

LUNGO.- Permitime una parola.

GAMBERONI.- Un momento (Apartándose.) ¿Cosa volete?

LUNGO.- Mirá cuánto tenés.

GAMBERONI.- Eh, cento cinquanta pesi.

LUNGO.- Bueno, ¿sabés lo que hacés?... Ese gringo es muy sonso. Se conformará con lo que le den. ¿Me comprendés?...

GAMBERONI.- ¡Guarda, guarda!... ¡Come son furbi i creolli! Madona.

LUNGO.- Vos le mandás el resto después a Gálvez.

GAMBERONI.- E una bella idea.

LUNGO.- Claro que sí. Es un servicio que le hacés a tu paisano.

GAMBERONI.- (Resuelto.) ¡E bén! (A Pedrín.) O paisán. Voi siete da Gálvez, amigo del mío íntimo amico D'Andrea.

PEDRÍN.- Certo.

GAMBERONI.- Io ti faré lo servizio. Tú mi dai lo numero, e porque tú no pierdas tiempo, io ti daró, tí daró... centi venti pesi.

PEDRÍN.- Bene. Grazie. Ma il resto.

GAMBERONI.- Io le manderó al amigo D'Andrea.

PEDRÍN.- Bravo. E fatto... Vi sono tanto riconocente, paisán.

BATIFONDO.- Mirá, Gamberoni, ¿por qué no le das el reló en garantía?

GAMBERONI.- ¿Il mio orologio?...

LUNGO.- (A Batifondo.) ¡Los angurrientos!...

GAMBERONI.- E bén. Prende anque il mío relogio.

PEDRÍN.- E bravo. Tú mi mandi il denaro e io ti mando l'orologio.

GAMBERONI.- Evviva l'armonía.

PEDRÍN.- ¡Evviva! ¡Padrona! Yo pago tutto. Ho fatto il mío negozio.

GAMBERONI.- ¡Un altra voerta!

PEDRÍN.- ¡Ah, no! Bisogna que io prenda lo treno. ¿Cuánto si debe?

CARMEN.- Cinco pesos.

PEDRÍN.- (Con gran generosidad.) Eccoli (Bajo.) Me debes tres y medio, ¿eh?

CARMEN.- ¡Andá, pelandrún!...

GAMBERONI.- E ni andiamo tutti al Retiro col paisano.

BATIFONDO.- Eso es. Todos juntos.

GAMBERONI.- Evviva l'armonía. (Cantando.) A casa, a casa, amici... Anque cuesto é de Cavallería... L'ha fatto uno italiano. (Mutis. Se oyen cantos y voces que se alejan.)