Fábulas en verso castellano/XXIV
Señor maestro, (preguntó Raimundo) los polvos de la madre Celestina, que todo lo alcanzaban en el mundo, ¿se sabe o se imagina de qué pudieran ser? -Cuatro ingredientes, (díjole el preceptor) omnipotentes, entraban en la mágica mixtura: oro, saber, esfuerzo y hermosura. Hoy, lo que tantas maravillas obra es el oro no más; el resto sobra. Por gracia, no de Dios, reina el dinero, soberano señor del mundo entero.