Cancionero (Petrarca)/La aura serena, que entre verde fronda
La aura serena, que entre verde fronda,
para herir murmurando al rostro llega,
al recuerdo de Amor el alma entrega,
cuando la herida abrió tan dulce y honda;
y al gesto, aunque haya quien de mí lo esconda,
pues o celo o desdén verlo me niega;
o al pelo, que hoy con perla y gema pliega
y fue ayer de oro rubio tersa onda;
el cual tan dulcemente ella esparcía
y luego recogía de tal suerte
que aún tiembla, al recordar, la mente mía.
Formó el tiempo después nudo más fuerte,
y de él tal lazo el pecho me oprimía
que no lo deshará sino la muerte.