Inmediatamente es obvio que si tomamos como fijo, para cada planeta, el arco normal BD [es decir el arcus visionis[2], Fig. 13.25], y [si los planetas] están dados al comienzo de [cada uno de] los signos Zodiacales en la intersección E, y por lo tanto el ángulo BED, DE también será dado y la posición en latitud del planeta en esta elongación [por ej. DE], a saber KH o ΘL; en consecuencia se dará KE o EL [respectivamente] y también la [correspondiente] distancia aparente, DK o DL. Por este mismo camino, (para evitar alargar nuestra discusión), calculamos, para todos los signos y para cada uno de los 5 planetas, aunque para una sola [la latitud terrestre], el paralelo intermedio utilizado anteriormente (Fenicia (Tiro)), dado que por si solo es suficiente, la distancia aparente desde la posición verdadera del Sol en las salidas y en las puestas [por ej. las primeras y últimas visibilidades], sobre la asunción de que los planetas por sí mismos estuvieron ubicados al comienzo de los signos. A continuación hemos establecido a estos, colocándolos, también, para una mayor comodidad del usuario, en 5 tablas, [una] para [cada uno de] los 5 planetas, cada una conteniendo 12 líneas. Las 3 primeras tablas, para Saturno, Júpiter y Marte, están arregladas en 3 columnas: la primera columna contiene los comienzos de los signos, la segunda las elongaciones en la salidas por la mañana, y la tercera aquellas [elongaciones] en la puestas por la tarde. Las 2 tablas siguientes, para Venus y Mercurio, están arregladas en 5 columnas: la primera, como antes, contiene los comienzos de los signos, la segunda las elongaciones en la salidas por la tarde, la tercera aquellas en las puestas por la tarde, y la cuarta, nuevamente, aquellas en las salidas por la mañana, y la quinta aquellas en las puestas por la mañana. Los diseños de las tablas son los siguientes.
↑Nota del traductor al español: El arco visual (del latín, arcus visionis) especifica la distancia mínima entre el Sol y otro objeto celeste, que es necesario para observar su salida o su puesta en posición helíaca (orto helíaco) y salida acrónica (el cuerpo celeste sale cuando el Sol se pone).
Por definición, es la profundidad del Sol medida perpendicularmente debajo del horizonte en el momento en que el objeto celeste llega al horizonte. El arco visual tiene diferentes valores para cada objeto celeste y para diferentes lugares de observación, ya que diferentes factores, como la magnitud aparente de la estrella, su desaparición y las condiciones atmosféricas influyen en el arco visual. Por ejemplo, la contaminación del aire y la contaminación lumínica en el área de una gran ciudad pueden aumentar considerablemente el arco visual necesario para percibir una estrella.
Una fórmula de aproximación de uso frecuente para el arcus visionis es: 10,5° + 1,4° * Magnitud aparente del objeto celeste.
Fuente Sehungsbogen.