¿Por qué tan grave la muchachita?
¿Por qué los goces del juego evita?
¿Por qué se oculta y, en un rincón,
el más sombrío d'estancia aislada,
gime solita y acurrucada,
como paloma sin su pichón?
¿Perdió su rorro grande, que dice:
papá? L'ausencia de Berenice,
su dulce amiga, ¿le causa afán?
¿Sufrió el regaño de adusta abuela,
o pena acaso porque a la escuela
mañana mismo la llevarán?
¡Ay! Es que ha muerto su hermosa gata,
cuyo bigote —púas de plata—
cien y cien veces acarició;
la del albo pelo, mayar sonoro,
ojos muy verdes, vetados de oro,
¡la Remonona que tanto amó!
Por eso pena la muchachita,
por eso el goce pueril evita,
odia el bullicio, y en un rincón,
el más sombrío d'estancia aislada,
gime solita y acurrucada
como paloma sin su pichón.