dicen que á falta de agua pueden hacerse las abluciones con arena y otro habla de los que quieren apagar la luz del sol soplando con su boca.
LXXXVII, pág. 182. Noches de insomnio. Dice Hesiodo que «las enfermedades visitan á los hombres de día, pero las que espontáneamente llevan males por la noche á los mortales lo hacen en silencio puesto que el prudente Zeus les quitó la voz.»
LXXXVIII, pág. 184. O «sea oscorbidulchos volivorco» otro pasaje, act. IV, escena 1.ª de la misma comedia de Shakespeare.
LXXXIX, pág. 186. Son palabras que Esquilo pone en boca de Prometeo el cual al decirle Hermes ó Mercurio que no sabe tener juicio le responde: «no te hablaría á tí, que eres un criado!»
XC, pág. 190. Los versillos 24 al 30 del capítulo XXXII del Génesis dicen: «Y quedóse Jacob solo y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba. Y como vió que no podía con