Nocturno (Alfredo Espino)
Algo siento que ha entrado por la abierta ventana.
Tú también has venido, sin duda entre el aroma
de la noche, quién sabe, mas lo cierto es que toma
vaguedades fantásticas tu imagen soberana...
Y junto a mí te sientas, y yo te digo: ¡“Hermana”!,
y me miro en tus ojos donde un llanto se asoma.
(De mi alma brota un verso como lilial paloma
que emigrara de alguna torre de porcelana...)
Y el insomnio echa flores, pues hasta mí viniste
entre el perfume vago de la noche más triste,
como un rayo de luna sobre una fosa abierta...
Pero te vas y grito... Sólo hay nada en la sombra,
y al eco suplicante de la voz que te nombra,
dentro de mí, implacable, la realidad despierta...