Mioriţa
de Anónimo

Al pie de una montaña,
Ventana hacia el Edén,
Por una cañada
Bajan hacia el valle,
Tres rebaños de ovejas
Con sus tres pastores.
Uno es moldavo,
Otro transilvano
Y el tercer valaco.
Y el transilvano,
Junto con el valaco
Hablan de matar
En tiempo de ocaso
Al pastor moldavo
Porque era rico,
Porque él tenía
Ovejas hermosas,
Gordas y gallardas,
¡ Perros más valientes,
Caballos más listos !

Pero esa ovejita
Con lana rizada,
Tres días seguidos
No quiere callar,
No quiere pastar.

- Mioriţă gorda,
Con lana oscura,
Tres días seguidos
Hablas sin parar.
¿ Es que no es buena
La hierba que paces,
O estarás enferma,
Querida oveja ?

- ¡ Querido pastor !
Lleva a tus ovejas
Hacia el bosque umbrío,
Con hierba para nosotras,
Y sombra para vosotros.
Dueño, dueño mío,
Llama a un perro,
A tu perro más valiente,
A tu perro más fiel,

Porque en el ocaso
Piensan a matarte
¡ El pastor valaco
Y el transilvano !
- Mioriţă hermosa,
Si eres maravillosa,
Y si moriré
En campo de ballueca
Pide al transilvano,
Pide al valaco,
Que me entierren cerca
A donde os ordeñan,
Para seguir con vosotras,
Al fondo del redil,
Para escuchar a mis perros.

Y tú, ovejita
Entierra conmigo
Mi flauta de haya
Que canta con anhelo,
Flauta de hueso,
Que canta tan tierno,
Flauta de saúco,
¡ Canción de fuego !
El viento que sopla
Les hará sonar
Vendrán las ovejas
Y sobre mi tumba
Sangre llorarán.
No les digas nunca
Que a mí me mataron.
Diles que me casé
Con una gran reina,
Novia de la tierra,
Que en mi boda
Cayó una estrella,
La Luna y el Sol
Me dieron corona,
Fueron invitados
Platanos y abetos,
Las montañas altas
Fueron sacerdotes,
Pajaros primorosos
Fueron los cantantes,
Estaban presentes
Pajaritos miles
Y antorchas fueron
¡ Las estrellas eternas !

Y si tú verás,
Si encontrarás,
Una madre anciana
Con cintura de lana,
Ojos lagrimando,
Por cumbres pasando,
A todos preguntando,
A todos hablando :

¿ Quien me conoció
Quien él que me vio
A un noble pastor,
Pasado por un anillo ?
Su rostro,
Espuma de la leche,
Su bigote,
Espiga del trigo,
Su pelo,
Ala del cuervo,
Sus ojos,
¡ Moras del campo !

Tú, mi ovejita,
Ten compasión,
Dile simplemente
Que yo me casé
Con la hija de un rey
En una ventana hacia el Edén.

Y a esa madre
No le digas, querida,
Que en mi boda
Cayó una estrella
Que fueron invitados
Platanos y abetos,
Que fueron sacerdotes
Las montañas altas,
Que fueron cantantes
Pajaros primorosos,
Que estaban presentes
Pajaritos miles,
Y que antorchas fueron
¡ Las estrellas eternas !