Los viajes de Marco Polo/Libro II/Capítulo XXX
CAPITULO XXX.
Sindifu confina con Mangi. La capital lleva el mismo nombre. En lo antiguo era rica y potente, y tenía un circuito de 20 millas.
Habiendo falleci lo un rey de esta provincia, y dejado tres hijos, dividió la cindad entre los tres, y cada uno amuralló lo que le correspondía, gozando en ella de las inmensas ri quezas que les había dejado su padre, hasta que el gran Kan conquistó el patrimonio de los tres hermanos. Por en medio de la ciudad pasa un rio llamado Quian, ancho de mélia milla, muy profundo, de 80 á 100 jornadas de largo, muy abundante en pesca y que desemboca en el Océano. Navegan por él muchísimos barcos, y en sus orillas exis ten ciudades y castillos en buen número. En el interior de la ciudad y sobre el rio hay un puente de piedra, largo de média milla y ancho de ocho pasus. De trecho en trecho se ven columnas de mármel que sostienen un tech; porque habeis de saber que el puente está cubierto de madera pintada. Hay tambien várias casetillas de madera para la venta de mercancías: por la mañana las ac man, y por la tarde las desarman. Allí es tán tambien las oficinas imperiales para la cobranza de los derechos sobre las mercaderías que se venden en el puerto, y que importan 1.000 monedas de oro.