Lo que no se puede enmendar, hacerlo nuevo
Lo que no se puede enmendar, hacerlo nuevo.
Poppe era corcobado y enteramente contrahecho, y como hombre de talento, que conocía sus defectos, acostumbraba decir cuando se enojaba:
— Dios me corrija.
Un cochero, con quien disputaba undia, le dijo:
— ¿Que Dios lo corrija, dice V.? ¿Pues no le costaría menos trabajo el hacerlo nuevo?