Libro de Buen Amor: 063
De la penitençia qu'el flayre dio a don Carnal,et de cómo el pecador se deve confesar, et quién ha poder de lo asolver I
Vino luego un frayle para lo convertir,
comenzolo a predicar, de Dios a departir,
hóbose don Carnal luego mucho a sentir,
demandó penitençia con grand' arrepentir.
En carta por escrito le daba sus pecados
con sello de poridat çerrados e sellados:
respondiole el flayre, que l' non serían perdonados,
cerca d'esto le dixo muchos buenos ditados.
Non se fase penitençia por carta nin por escrito,
si non por la boca mesma del pecador contrito:
non puede por escrito ser asuelto nin quito,
menester es la palabra del confesor bendito.
Pues que de penitençia vos fago mençión,
repetirvos quería una buena liçión:
debedes creer firmemente con pura devoçión,
que por la penitençia habredes salvaçión.
Porque la penitençia es cosa preçiada,
non debedes, amigos, dexarla olvidada,
fablar en ella mucho es cosa muy loada,
quanto más la segueremos, mayor es la soldada.
Es me cosa muy grande en tan grand' fecho fablar
es peligro muy fondo más que todo el mar:
só rudo de sçiençia, non me oso aventurar,
salvo un poquillo que oí desputar.
Et por aquesto que tengo en corazón de escrebir,
tengo del miedo tanto quanto non puedo desir,
con la sçiençia poca he grand' miedo de fallir
señores, vuestro saber quiera mi mengua complir.
Escolar só mucho rudo, nin maestro nin doctor,
aprendí et sé poca para ser demostrador,
aquesto que yo dixiere, entendetlo vos mejor,
so la vuestra emienda pongo el mi error.
En'l santo decreto hay grand' desputaçión,
si se fase penitençia por la sola contriçión:
determina al cabo qué es la confesión
menester de todo en todo con la satisfaçión.
Verdat es todo aquesto do puede omen fablar,
do ha tiempo e vida para lo emendar;
do aquesto fallesçe, bien se puede salvar
por la contriçión sola, pues ál non puede far.
Quito quanto a Dios que es sabidor complido,
mas quanto a la iglesia, que non judga de ascondido,
es menester que faga por gestos e gemido
signos de penitençia, que es arrepentido.
En sus pechos feriendo a Dios manos alzando,
sospiros dolorosos muy tristes sospirando,
signos de penitençia de los ojos llorando,
do más faser non puede, la cabeza inclinando.
Por aquesto es quito del infierno mal lugar,
pero que a purgatorio lo va todo a purgar,
allí fas la emienda, purgando el su errar
con la misericordia de Dios que lo quiere salvar.
Que tal contriçión sea penitençia bien llena,
hay en la santa iglesia mucha prueba e buena,
por contriçión e lágrimas la santa Magdalena
fue quita et absuelta de culpa e de pena.
Nuestro señor Sant Pedro tan santa criatura
negó a Jesu Christo con miedo et quejura,
sé yo, que lloró lágrimas triste con amargura,
de satisfaçión otra non fallo escritura.