La flor de los recuerdos (México): 07

I.
III.


II. editar

Southampton—Diciembre—4—1854

EL POETA. ¿Qué buque á la vela

Mas pronto se dá?

EL BARQUERO. Aun hierve la estela

Que abrió el Paraná.

EL POETA. ¿A dónde navega?
EL BARQUERO. A México va.
EL POETA. ¡Un bote! —voguemos:

Haz fuerza de remos
Y sigue la estela que abrió el Paraná.






Cruzaba el poeta la estensa bahía
Mecido en los brazos de un alma ilusion,
Cuando un luminoso fantástico génio
Mas leve que el fresco marino vapor,
Vogando en un copo de cándida espuma
El rápido bote donde iba alcanzó.

EL GENIO. ¿A dó va el poeta?
EL POETA. A México voy.
EL GENIO. ¿En pós de fortuna

Magnífica?

EL POETA. No:

En pós de la gloria,
De luz y fé en pós.

EL GENIO. ¿Y esperas hallarlas

En la otra region?

EL POETA. Sin duda: es la América

La tierra del sol:
Es un paraiso
Dó puso el Señor
La luz y la vida
Como El las creó,
Espléndidas, ricas
De fuerza y calor,
Que dan al ardiente
Mortal corazon
La paz, la ventura,
La fé y el amor.
Es México un valle
Risueño y fecundo
Abierto en un mundo
Que el nuestro mejor:
Allí la existencia
Risueña y dichosa
No es carga penosa,
Del cielo es un dón.

A México parto
La tierra del sol;
Allí no se cambia
Jamás de estacion,
Allí se dá á un tiempo
La fruta y la flor,
Del cielo y del suelo
Se vé en la estension
Brillar noche y dia
La gloria de Dios.
A México parto
La tierra del sol.

Mirar quiero un dia la luz de aquel cielo,
Sentir en mi alma la fé de aquel suelo,
Beber el ambiente de aquella region,
Gozar embriagado los suaves aromas
Que impregnan sus valles que exalas sus lomas,
Oir de sus vagos murmullos el són,
Llenar de armonía sus campos lozanos,
Dejar en mis versos á un pueblo de hermanos
La fé de un poeta de buen corazon.

EL GENIO. ¿Qué esperas que en cambio su pueblo te dé?
EL POETA. Su amor: no concibo mejor galardon;

Sus bellos cantares allí aprenderé,
Y cuando me vuelva de aquella region,
Sus bellos cantares á Europa traeré:
Mis himnos ardientes de amor y de fé
Del pueblo me ganen tal vez la aficion,
Y en él un recuerdo feliz dejaré:
Si al fin satisfago mi noble ambicion,
A Europa cantando feliz volveré.

EL GENIO. Poeta que abrigas tan noble pasion,

A México parte, la América vé:
Contigo dó quiera que vayas iré,
Dó quier amparando tu noble mision.
Mas vale que el oro
De un pueblo el amor:
Tu fé por los pueblos
Derrame tu voz,
Y tú de las almas
Serás posesor.
Tendrás donde quiera
Cariño y mansion:
La buena memoria
Que dejes en pos,
Será una fragante
Bellísima flor
Que brote en las almas,
Y en toda estacion
Dé siempre lozana
Suavísimo olor.
A América parte;
Contigo voy yo;
A México vamos
En brazos de Dios.

EL POETA. Mas tú, génio hermoso, que á América vas

Conmigo, amparando mi oscura mision,
Que luz y consuelo y aliento me das,
¿Quién eres, risueña y celeste vision?

EL GENIO. La fé: de tu alma no me eches jamás,

Y haré tuyo el orbe region á region.






Tal dijo al poeta la fé de su alma,
Y al punto del aire y el mar en la cama
Tornó á disiparse su blanca vision;
Henchido el poeta de fé, y de alegría
Cruzó la bahí
Y el buque abordó.