La duración del placer

Nota: En esta transcripción se ha respetado la ortografía original.


La duración del placer.

Un alemán, que ha estudiado treinta años sobre esta idea, dá las contestaciones siguientes:

— ¡Oh! tú que amas el placer puro, lee:

— ¿Lo quieres por un instante? Si tienes sed, bebe agua íresca. — ¿Por algunos minutos? Come un bocado que te agrade, contempla un hermoso caballo que no sea tuyo; una cara bonita, una pintura famosa. — ¿Por una ó dos horas? Asiste á un brillante espectáculo, lee un buen libro, escucha una buena orquesta, haz una. dos ó mas visitas á una dama joven y hermosa; abandónate recostado sobre flores, cerca de una fuente cristalina, á dulces ideas, contemplando el hermoso cielo. — ¿Por una tarde? Pásala en conversación de pocos, pero escogidos amigos, de damas hermosas, amables y sabias, sin que ellas demuestren conocerlo. — ¿Todo un dia? Haz una buena acción al levantarte, y proyecta hacer otra después de comer. — ¿Por una semana entera? Asiste á li boda de uno de tus amigos. — ¿Por seis meses? Compra una casa en el campo, al lado de la suya, planta y recoge tu cosecha, edifica alguna habitación agradable. — ¿Por un año? Cásate con una dama hermosa á quien ames. — ¿Por dos años? Añade á tus bienes una hacienda donde tengas pobres á quienes hagas bien. — ¿Por toda la vida? Practica la virtud, ejerce la caridad, sin que nadie lo sepa, trabaja y goza con moderación hasta de los placeres inocentes.