Ideal
Hacia Occidente mi alma, como el ave
Que cruza el aire con su largo vuelo,
Llegar quisiera hasta la blanca y suave
Estrellita de luz, su dulce anhelo...
Yo sé que es infantil, el ansia mía
De llegar hasta el astro refulgente
Y traerlo, y de luz y de armonía
Irradiar su fulgor sobre mi frente...
Y que soy como el niño de aquel cuento
Que con el cesto de juntar las flores,
Del arco-iris en pos, corría atento
Para cortar su luz y sus colores...
Mas qué queréis, adoro la blancura
Que sabe a incienso y a rumor de alas;
Amo la cándida, azucena pura
Por el albor sublime de sus galas;
Y es blanca, esté muy alta, es esplendente
La dulce estrella que mis pasos guía,
Que tímida se eleva en Occidente
Cuando muriendo el Sol termina el día!
Mayo 1917.