CXII

Si otro fue el hombre que sorbió en el vaso

de tu boca purpúrea el primer beso...

no puede estar tu corazón ileso

ni ilesa puede estar... tu piel de raso.


En la vida decide el primer paso,

y a decirte verdad yo te confieso,

que es por eso no más... no más por eso,

que, aunque mucho te adoro, ¡no me caso!


No me caso contigo... por exceso

de pulcritud... o por temor acaso...

porque... porque... ¡el asunto es muy espeso!


Y además, porque un beso es siempre un caso

muy grave... una razón de mucho peso

que hace pensar en... ¡en cualquier fracaso!