Diferencia entre revisiones de «Almagesto: Libro IV - Capítulo 01»

En el libro precedente tratamos todos los fenómenos asociados con el movimientoMovimiento del Sol. ComenzamosAhora ahoracomenzamos nuestra discusión sobre la ''Luna'', como es apropiado paraen el orden lógico. Al hacer ello pensamos, como nuestro primerprimera debertarea, no tomar una aproximación ingenua o arbitraria en nuestro uso de las observaciones relevantes. MasMás bien, para establecer nuestras nociones generales [sobre esteéste tema], deberíamos confiar especialmente en aquellas demostraciones que dependen de observaciones las cualesque no solosólo cubren un largo período [tiempo], sino las que actualmente están hechas actualmente sobreen los eclipses[https://es.wikipedia.org/wiki/Eclipse lunares'''Eclipses Lunares''']. Para ello, éstas son sólo las observaciones que a uno le permite determinar precisamente la posición Lunar precisamente: todas las otras, si ellas son tomadas de los pasos [de la Luna] cerca de las estrellas fijas, o desde [avistamientos con] instrumentos, o desde eclipsesEclipses solares, pueden contener un considerable error debido a la paralaje[https://es.wikipedia.org/wiki/Paralaje '''Paralaje'''] Lunar. Solamente éstas son para futuros desarrollos particularesen futurosparticular [de la teoría] que deberíamos utilizar para otros tipos de observaciones en nuestras investigaciones.

La distancia entre la esferaEsfera de la Luna y el centro de la Tierra, diferente a la distancia haciahasta la eclíptica[https://es.wikipedia.org/wiki/Eclíptica '''Eclíptica'''], no es mayor que la masa de la tierraTierra tiene como proporción de un punto a la misma [(eclípticaEclíptica)]. Por lo tanto, necesariamente [a continuación] sigue, que la línea recta dibujada desde el centro de la Tierra (que es el centro de la eclípticaEclíptica) a través del centro de la Luna <ref name="Referencia 002"></ref> haciahasta un punto sobre la eclípticaEclíptica, el cualque determina la posición verdadera ([tal como ésteésta lo hace] para todos los cuerpos), no siempre coincide en esteéste caso, incluso sensiblemente, con la línea dibujada desde algún punto sobre la superficie de la Tierra, siendo éste, el punto de vista del observador, haciahasta el centro de la Luna, que determina su posición aparente. Sólo cuando la Luna está en el zenit[https://es.wikipedia.org/wiki/Cenit '''Cenit'''] del observador, hace que coincidan las líneas [que van] desde el centro de la Tierra y [la línea de] los ojos del observador a través del centro de la Luna haciahasta la eclípticaEclíptica. Pero cuando la Luna está desplazada de cualquier manera de la posición del zenitCenit, las direcciones de las líneas de arribaanteriores comienzan a ser distintas, y por lo tanto, la posición aparente no puede ser la misma como la verdadera, sino [difiere de ella], como la [línea a través] del ojo del observador que asume varias posiciones con respecto a la línea dibujada a través del centro de la Tierra, [y por una cantidad] proporcional al ángulo variable de la inclinación [entre las dos líneas].

EstaÉsta es la razón porqué, en el caso de los eclipses'''Eclipses solaresSolares''', son causados por el paso de la Luna por debajo y bloqueando [(eclipsando) elal Sol] (cuando la Luna entra dentro del cono [que va] desde el ojo del observador hasta el Sol ésta produce el oscurecimiento que finaliza hasta que haya salido [del cono] nuevamente), el mismo <ref name="Referencia 003"></ref> eclipseEclipse no se mostrará idéntico, tanto en tamaño como en duración <ref name="Referencia 004"></ref>, en todos los lugares. La Luna no produce un oscurecimiento para todos los observadores, según las razones establecidas arriba, e [incluso para aquellos a quienes ésta produce el oscurecimiento] no parece obscureceroscurecer [ocultareclipsar] las mismas partes del Sol [a todos por igual].

Mientras en el caso de los eclipsesEclipses Lunares no hay allí tal variación debido a la paralaje, dado que la posición del observador no es causa contributiva a lo que sucede en un eclipseEclipse lunarLunar. '''La luz de la Luna es causada en todo momento por la iluminación del Sol'''. Por lo tanto cuando ésta está diametralmente opuesta al Sol, normalmente se muestra hacia nosotros iluminada en su superficie total, dado que su hemisferio iluminado en su totalidad es vuelto hacia nosotros así [como hacia el Sol] en ese instante. Sin embargo, cuando su posición en la oposición es tal que ésta[la Luna] está inmersa en el cono de sombra de la Tierra (que gira con la misma velocidad como la del Sol, pero opuesto a él), entonces la Luna pierde la luz sobre una parte de su superficie correspondiente a la cantidad de su inmersión, tal como la Tierra obstruye la iluminación del Sol. Por lo tanto ésta parece serestar eclipsada para todas las partes de la Tierra por igual, ambos en tamaño [del eclipseEclipse] y la longitud de los intervalos [de las varias fases].

Ahora para establecer nuestra teoría'''Teoría generalGeneral Lunar''' necesitamos utilizar posiciones verdaderas de la Luna, y no las aparentes; necesariamente [una forma] ordenada y regular debe preceder y servir como fundamento para lo desordenado e irregular. Entonces, para las razones [descritas] arriba, declaramos que no debemos utilizar, para esteéste propósito, observaciones de la Luna dentro de la posición del observador que ocupe el observador, sino sólo las observaciones de los eclipsesEclipses Lunares, dado que [sólo] en éstas hacen que las posiciones del observador no tengan efecto sobre la determinación de la posición de la Luna. Para ello es evidente que, si encontramos el punto sobre la eclípticaEclíptica el cual el Sol ocupa en el momento del eclipse''Eclipse medioMedio'' (que es, tan como precisamente podamos determinar, el momento en el cual el centro de la Luna esestá diametralmente opuesto a la longitud del Sol), entonces en el mismo instante del eclipseEclipse medioMedio la posición precisa del centro de la Luna será el punto diametralmente opuesto.

<ref name="Referencia 001">Por los capítulos 1-3 ver ''HAMA'' 68-73, 308-73, 308-15, [https://en.wikipedia.org/wiki/Olaf_Pedersen Pedersen] 160-4.</ref>

<ref name="Referencia 002">Leer <span style="font-family: Symbol"></span> (en el manuscrito D y el Ar.) en cambio de <span style="font-family: Symbol"></span> (“la línea recta dibujada desde el centro de la Luna”, que no tiene sentido) en H266,5. El error, mayormente [dado] en el manuscrito griego, se debe a la [https://es.wikipedia.org/wiki/Haplología haplografía], y es una muestra importante para todos excepto en el manuscrito D y sus descendientes que provienen de un único manuscrito (Bizantino?). Corregido por [https://en.wikipedia.org/wiki/Karl_Manitius Manitius].</ref>

<ref name="Referencia 004">Definición de “duración”: los manuscritos griegos tienen el término vago de “tiempo” (<span style="font-family: Symbol"></span>). Es aclarado por H268,1 <span style="font-family: Symbol"></span>, “la duración de los intervalos [de las fases totales y parciales]”. Ptolomeo también puede estar aludiendo, en ambos lugares, al hecho de que los instantes presentes, por ej. en el comienzo o en el eclipseEclipse medioMedio de Sol, son distintos en lugares diferentes, y por una cantidad que no corresponde directamente a la diferencia en la longitud [terrestre]. </ref>