El profeta/El Tiempo
El Tiempo
Y un astrónomo dijo, «Maestro, ¿qué del Tiempo?»
Y él contestó:
Medirías el tiempo, el sin límite y el inconmensurable.
Ajustarías tu comportamiento y hasta dirigir el rumbo de tu espíritu según horas y las estaciones.
Del tiempo harías un arroyo en cuya orilla te sentarías y mirarlo fluyendo.
Pero lo eterno dentro de ti es consciente de la eternidad de la vida,
Y sabe que ayer sólo es la memoria de hoy y mañana es el sueño de hoy.
Y lo que canta y considera dentro de ti todavía habita dentro de los bordes de ese primer momento que salpicó las estrellas en el espacio.
Y, ¿quién de Uds. no se siente que su poder de amar es sin límite?
Pero, ¿quién no se siente ese mismo amor, aunque es sin límite, contenido en el centro de su ser, y no moviéndose de pensamiento del amor a pensamiento del amor, ni de acto del amor a otro acto del amor?
Y, ¿el tiempo no es como el amor, íntegro y sin ritmo?
Pero, si en tu pensamiento tienes que medir el tiempo por estaciones, que cada estación rodee todas las otras estaciones,
Y que hoy abrace al pasado con recuerdo y al futuro con anhelo.