El amor médicoEl amor médicoTirso de MolinaActo III
Acto III
[Salón del real Alcázar de Coimbra.]
(EL REY DON MANUEL,
DOÑA JERÓNIMA, a su izquierda,
con capa, gorra y muceta amarilla,
y sobre la gorra borla del mismo color;
DON GASPAR, DON ÍÑIGO, DON MARTÍN,
DON RODRIGO, TELLO
y Acompañamiento del rey.)
(Suenan dentro vítores y música.)
DOÑA JERÓNIMA
Mezcla vuestra majestad
lo grave con lo apacible,
causando amor y respeto
al soberbio y al humilde,
y en mí eterna obligación 5
de que estudios le dedique,
con que, honrándome, celebre
merced tan nueva y insigne.
EL REY
Dotor, vuestras muchas letras
en años tan juveniles 10
merecen que yo las honre,
porque los demás se animen.
La cátedra que llevastes,
y soluciones sutiles
que soltaron argumentos, 15
es justo que se confirme
con que en mi cámara entréis,
y desde hoy el pulso os fíe
la reina, en cuya salud
la de Portugal consiste. 20
Dotor de cámara sois.
TELLO
(Aparte con su amo.)
Si a mí me hicieran de orines...
DON GASPAR
¡Ah, necio!
TELLO
Pues ¿qué tenemos?
Veráslo si me hace el brindis.
DOÑA JERÓNIMA
Deme esos invictos pies 25
vuestra alteza, y los felices
siglos de la antigüedad
en vos nuestra España admire.
Más precio vuestra alabanza,
que las que historias escriben 30
dió a Galeno Marco Aurelio:
aunque Atenas sacrifique
a Hipócrates por su dios,
mientras estatuas le erige,
que en oro honren su areópago, 35
aunque Justiniano estime
a Oribasio por su Apolo,
y con Octaviano prive
su médico Antonio Musa,
con Alejandro Felipe, 40
no igualan a las mercedes,
gran señor, que se me siguen
de vuestra real alabanza;
mas como Séneca dice:
aquél qui laudandum laudat, 45
se ipsum laudat.
TELLO
(Aparte.)
Con latines
nos dan la muerte afeitada
aquestos engaña-simples.
REY Id a visitar la reina,
dotor, desde hoy; que está triste, 50
y tengo en vos mucha fe.
(Vase EL REY con su acompañamiento.)
DOÑA JERÓNIMA
Nuevos orbes se os humillen.
DOÑA JERÓNIMA, DON GASPAR,
DON ÍÑIGO, DON RODRIGO,
MARTÍN, TELLO.
DON ÍÑIGO
Gocéis la plaza, dotor,
muchos años, que autoricen
la cátedra vitoriosa, 55
que hoy justamente os recibe.
DOÑA JERÓNIMA
No esperaba menos suerte
quien a vuescelencia sirve,
pues siendo yo su criado,
era forzoso seguirse 60
tal dicha tras tal favor.
DON ÍÑIGO
Ni será razón se olvide
por los cargos de palacio
la salud que en vos consiste
de Estefanía.
DOÑA JERÓNIMA
¡Jesús, 65
señor! ¿Eso ha de advertirme
vuescelencia, cuando sabe
lo que medro yo en servirle?
Al momento parto a verla.
DON ÍÑIGO
No quiere que la visite 70
otro médico; pagalda
la fe que os tiene.
DOÑA JERÓNIMA
Ni impiden
estorbos obligaciones.
Yo espero restituirle
a vuestra excelencia el gusto 75
que su salud le apercibe.
(Vase DON ÍÑIGO.)
DON MARTÍN
La de prima gocéis presto,
señor dotor.
DOÑA JERÓNIMA
Porque estimen
más a quien es vuestro esclavo.
(Vase DON MARTÍN.)
DOÑA JERÓNIMA, DON GASPAR,
DON RODRIGO, TELLO.
DON GASPAR
Y porque yo participe 80
de vuestras dichas también
como espero, aunque no os dije
cosas que en orden a esto
será razón que os obliguen,
deseo yo vuestras medras. 85
DOÑA JERÓNIMA
Ya entiendo. Si lo permite
el tiempo, que ya mejora,
aunque desde ayer no vistes
vuestra dama, yo os prometo
que la ausencia que os aflige, 90
dure poco. No os dé pena
que por hoy os la limite.
DON GASPAR
¡Qué mal tomáis a mi amor
el pulso, pues que no os dice
cuán diversos accidentes 95
son ocasión que se entibien
memorias desa persona!
DOÑA JERÓNIMA
Aunque el dotor pronostique,
cuando es sabio, no sé yo
que haya alguno que adivine. 100
Si me habláis escuridades...
DON GASPAR
Es mi voluntad esfinge:
ella se declarará,
si a solas queréis oírme.
DOÑA JERÓNIMA
Por hoy tengo ocupaciones 105
catedráticas; decidme
mañana lo que gustéis,
porque dese mal os libre.
DON GASPAR
¡Largo plazo!, pero, vaya.
(Vase.)
DOÑA JERÓNIMA, DON RODRIGO, TELLO.
TELLO
Dotor para con chapines, 110
que con la amarilla borla
puede llamarse Amarilis,
en mí los tales diviesos
son de linaje de chismes,
que unos van naciendo de otros, 115
y me abrasan los cojines.
No hay en todo Portugal
vidriero que se obligue
a labrar tanta ventosa,
como mandáis embestirme. 120
Pues si de sangre me sacan
veinte onzas, o veinte tigres,
la cuba de Sahagún
se despulsará: aforisme
vuesamerced cien cerotes 125
que el orbe me circulicen,
así esa cara barbeche,
y salga tenor de tiple.
DOÑA JERÓNIMA
Que me place, señor Tello,
la parte lesa se bizme 130
con unos polvos que atajen
el dolor.
TELLO
Pues polverice.
¿Cuántos, y de qué?
DOÑA JERÓNIMA
Seis onzas
de pimientos.
TELLO
¡Puto!
DOÑA JERÓNIMA
Piquen
medianamente, de modo 135
que en breve los cautericen,
porque son ramo de peste;
y juntamente se aplique
de alumbre con albayalde
un adarme, y de salitre 140
seis escrúpulos.
TELLO
Por Dios,
dotor, que no escrupulices,
si tienes buena conciencia,
remedios que me acribillen.
Cicatrice 150
rezagos de Tamorlán.
¿Quién tales emplastos pide?
¡Salitre! ¿Soy yo arcabuz?
¡Pimientos! ¿Soy yo cacique?
¡A-lumbre yo, y no de pajas! 155
¡Fuego en médicos meñiques!
(Vase.)
DOÑA JERÓNIMA, DON RODRIGO.
DON RODRIGO
Entre tantos parabienes,
si no es que se desestimen
los míos por ser postreros,
bien merecen preferirse 160
a los demás, pues sabéis
que no hay quien se regocije
como yo con vuestras honras
desde que a esta corte vine.
En fe pues destos deseos, 165
y albricias de que os sublime
el cielo a pulsos de altezas,
que rijáis años felices,
bien será, dotor Barbosa,
que de la pasión que os dije, 170
y por instantes me abrasa,
vuestra experiencia me alivie.
Vine, vi y amé celoso.
DOÑA JERÓNIMA
Eso es, porque simbolice
con lo que a Roma escribió 175
César: veni, vidi, vici.
DON RODRIGO
Amé, en fin, tan brevemente,
que juzgo por imposible
que sea amor el que me quema;
porque si el amor consiste 180
en reiterar asistencias,
comunicar apacibles
simpatías, y primero
es forzoso que se incline
una alma, y que poco a poco 185
venga el fuego a introducirse
por previas disposiciones
que las contrarias resisten,
¿cómo podré yo, dotor,
en un instante rendirme 190
a unos ojos, que tan presto
me hicieron su combustible?
DOÑA JERÓNIMA
Filósofo habláis. Sabed
que amor, que en la vista asiste,
es tal vez fascinación, 195
y ésta, tarde o nunca admite,
si halla el sujeto dispuesto,
dilaciones; porque el lince
en un instante penetra
impedimentos visibles. 200
Llegan, mediante la luz,
especies, que se dirigen
por los rayos visuales
al objeto, y dél reciben
la calidad contagiosa 205
que al retroceder admiten
los ojos con los retratos
que traen para que los mire.
Luego, el sentido común
manda que se depositen, 210
digámoslo así, en su sala,
donde materiales viven.
Toda esta acción es corpórea:
llega luego el alma y pide
al entendimiento agente 215
que las inmaterialice,
y vuelva espirituales;
que como no se las guise
a su modo y proporcione,
ni las digiere, ni admite. 220
Formada la intelección,
la voluntad, que es quien rige
todo el hombre, como reina,
o la reprueba o elige.
Destas dos operaciones, 225
la primera se divide
desotra, por ser corpórea:
la que en los ojos asiste,
en un instante retrata
lo que la mandan que mire, 230
volviendo con las especies
que de lo que vió se siguen.
Si el objeto que miró
era hermoso, apetecible.
y conformidad de estrellas 235
causan a que se le incline
el natural apetito
que está en la concupiscible,
al momento lo desea,
si estorbos no se lo impiden. 240
La voluntad, que del alma
es potencia noble y libre,
viendo espiritualizada
la imagen con que la sirven,
produce luego el amor, 245
sin que los astros la obliguen,
con la apariencia del bien,
que es el objeto que sigue;
y a este tal, cuando a ella llega,
haciendo que la apadrine 250
el apetito animal
con cartas de favor, rinde
privilegios voluntarios,
si no es que constante y firme
el albedrío se oponga; 255
que el sabio siempre resiste.
Como el alma y sus potencias
tienen acciones sutiles
por ser espirituales,
sin que tiempo necesiten, 260
obran instantáneamente;
y así el amor que las sigue,
puede, según más o menos
es su objeto apetecible,
amar aprisa o despacio; 265
y quien esto contradice,
ni sabe filosofar,
ni por sabio ha de admitirse.
De modo, que si al instante
que vos vuestra dama vistes, 270
la amastes, es porque en ella
vinieron a un tiempo a unirse
influencias de los cielos,
simpatías apacibles,
fascinación amorosa, 275
y proporciones felices.
No han hecho menor efeto
en ella, si he de regirme
por sus pulsos, que pregonan
las prendas que en vos compiten 280
con las del que se os opone;
pues, desde que os vió, anda triste,
con Don Gaspar intratable,
y con vos menos terrible.
Dejadme a mí el cargo desto: 285
que aunque yo no vaticine,
no en balde impedí el hablarla
Don Gaspar. Apercebidme
para guantes cuando estéis
en altura tan sublime, 290
que con título de esposo
mis curas os maravillen.
Y adiós, que hay muchos enfermos.
(Vase.)
DON RODRIGO.
DON RODRIGO
Hazlo tú como lo dices,
¡oh médico prodigioso! 295
y cuanto quisieres, pide.
¡Vive Dios, que ha dicho bien,
pues desde el punto que vine,
desdeñando a Don Gaspar,
con los ojos le despide! 300
¿Mas si a su instancia el dotor
ha ordenado que le priven
de hablarla? Bien puede ser,
pues no sin misterio dice
que ocasiono su tristeza. 305
¿No es mujer? ¿No me apercibe
a amarla un dotor tercero?
Pues él vencerá imposibles;
que hay médicos in utroque,
criminales y civiles, 310
con billetes por recetas,
que a amor y a Galeno sirven.
(Vase.)
[Calle.]
(Salen DON GASPAR y TELLO.)
DON GASPAR
En achaque del dotor
vengo a verla.
TELLO
Luego, ¿aun dura
el tema de tu locura? 315
DON GASPAR
Estoy perdido de amor.
TELLO
Tendrá su achaque de bruja,
y atizará aquesa llama
hasta topar otra dama
que la saque de la puja, 320
que con ésta ya es la cuarta
que hemos mudado.
DON GASPAR
¿Qué quieres?
Entre todas las mujeres...
TELLO
¿Rezas?
DON GASPAR
Sola es Doña Marta
digna de ser adorada. 325
TELLO
Yo que rezabas creía
por ella el Ave-María.
DON GASPAR
Tello, ¿no es cosa cansada
verte siempre de un humor?
TELLO
Entre todas las mujeres, 330
dicen, bendita tú eres
los que rezan. Si tu amor
da en hereje, ¿qué te espantas?
DON GASPAR
No mezcle tu desatino
lo humano con lo divino. 335
TELLO
Ni mudes tú damas tantas.
Estamos en tierra ajena;
el recato portugués
con las mujeres, ya ves
que libertades enfrena. 340
El uso desto te avisa:
toda doncella de casa
no sale hasta que se casa,
ni aun los domingos, a misa.
DON GASPAR
Eso será en las aldeas: 345
Tello, no son dese porte
privilegios de la corte,
ni tú mi agorero seas.
En su cátedra ocupado
su hermano, me da lugar 350
de poderla visitar:
ya sabes con el agrado
que corriendo a su hermosura
velos, dijo: cavalleiro,
olhai, que muito vos queiro. 355
Gocemos la coyuntura
de hablarla, y ver si en su casa
es tan agradable y bella
como juzgué al salir della.
TELLO
Por mí vaya, mientras pasa 360
otra, que en todo distinta,
te pique por despicarte
de estotra, y nos desenmarte:
vendrá a ser la dama quinta.
Sale DOÑA JERÓNIMA, de médico.
-DON GASPAR, TELLO.
DOÑA JERÓNIMA
¿Segunda vez, Don Gaspar, 365
en mi barrio, y a estas puertas?
Si en Castilla están abiertas,
dando ocasiones lugar
que logren sus intereses,
acá las cierra el honor, 370
porque del modo que amor,
son los celos portugueses.
¿Qué pretendéis vos aquí?
DON GASPAR
No tenéis por qué alteraros,
si advertís que vengo a hablaros. 375
DOÑA JERÓNIMA
Andáis huyendo de mí,
y rondándome la calle;
sabéis que tengo una hermana;
no quitáis de la ventana
los ojos... ¡Muy gentil talle 380
para venirme a buscar,
dejarme con Don Rodrigo
agora, y hacer testigo
al que os viere registrar
mis puertas, de liviandades 385
que culpen vuestra nobleza!
La castellana llaneza
permite allá ociosidades,
que por acá lleva mal
la gente menos sencilla. 390
Mientras no estéis en Castilla,
vivid como en Portugal,
y hayámonos bien los dos;
que entre libros y recetas,
guarda también escopetas 395
mi estudio.
TELLO
(Aparte.)
¡Zape! Por Dios
que es el dotor desbarbado
hombre de sangre en el ojo.
DON GASPAR
Desembarace ese enojo
la pena que os he causado, 400
y escuchadme como amigo.
DOÑA JERÓNIMA
¿Qué me podéis vos decir?
DON GASPAR
Si no me queréis oír,
mal lo sabréis.
DOÑA JERÓNIMA
Decid.
DON GASPAR
Digo.
Yo, puesto que no estudié, 405
si amor es filosofía,
sé que Doña Estefanía
todas las veces que os ve,
del mal que la desatina
se aligera, y que los dos 410
entendiéndoos, halla en vos
su médico y medicina.
De aquí proceden impulsos
de amor más que de tristeza;
de aquí el gastar su belleza 415
tanto tiempo en daros pulsos,
que son índices del alma;
el pediros que templéis
fiebres, que vos encendéis;
daros una y otra palma; 420
que como consiste en tactos
vuestra facultad, dotor,
el médico y el amor
todo es físicos contactos;
de aquí, en fin, el limitarme 425
que la diga mis desvelos,
ya porque vos tenéis celos,
ya porque ella en desdeñarme
por vuestra causa se emplea.
DOÑA JERÓNIMA
Baste, señor Don Gaspar, 430
que no es noble el maliciar,
sino villano en su aldea.
Yo soy hombre de opinión,
y hasta agora nadie ha habido
que haya, cual vos, deslucido 435
la médica profesión,
ni la justa confianza
que todo el mundo hace della.
DON GASPAR
No sé si yerra en hacella
quien sus peligros alcanza. 440
Lo que acabo de deciros
no ha sido para ofenderos,
sino sólo para haceros
mi amigo; y para serviros,
pretendo certificaros 445
de cuán poca competencia
os ha de hacer mi asistencia,
si gustáis aseguraros
con que quedemos los dos
deudos por afinidad. 450
DOÑA JERÓNIMA
No os entiendo.
DON GASPAR
La beldad
que, retratándoos a vos,
puso el cielo en vuestra hermana,
tiene en mí tanto poder...
DOÑA JERÓNIMA
Pues ¿vístesla vos?
DON GASPAR
Ayer, 455
honrando aquella ventana.
Que por no obligar desdenes
de quien enferma por vos,
quisiera que entre los dos
partiésemos nuestros bienes: 460
yo cediéndoos el derecho
que tengo en Estefanía;
y vos... ¿Cómo os dejaría
desta verdad satisfecho?
Y vos, en fin, no rehusando 465
que con medios permitidos,
mientras hacemos partidos
que amoroso voy trazando,
supiese la calidad
que el cielo a los dos os dió; 470
que si, como pienso yo,
hallo en aquesta ciudad
quien vuestra limpieza apruebe,
sin que en el dote repare,
cuando esposa la llamare, 475
hará mi amor lo que debe,
habilitándoos a vos;
pues siendo, en fin, mi cuñado,
quedáis más autorizado
para que podáis los dos 480
lograr vuestros pensamientos,
y más quedando a mi cargo
defenderos.
DOÑA JERÓNIMA
Cuento largo,
y arena los fundamentos.
Don Gaspar, yo os doy mi fe 485
que si en la sangre estribara
lo que vuestro amor repara,
aunque médico, no sé
quién a quién hace ventaja;
que en la hacienda cierto estoy 490
que si tan rico no soy,
no es mi fortuna tan baja,
que a faltar -mil años viva-
un mi hermano, no adquiriera
mayorazgo que os pudiera 495
admirar; pero no estriba
aquí la dificultad;
que siendo médico yo
de cámara, ya adquirió
principios mi calidad 500
con que atesore intereses;
que aunque entran necesitados,
siempre mueren hacendados
médicos y ginoveses.
Yo estudié la medicina 505
por inclinación no más,
sin que intentase jamás
que facultad tan divina
fuese de pane lucrando.
En cuanto a esto, es cosa llana 510
que os estaba bien mi hermana.
DON GASPAR
Pues ¿en qué estáis reparando?
DOÑA JERÓNIMA
¿He de decirlo, en efeto?
DON GASPAR
No me suspendáis ansí.
DOÑA JERÓNIMA
Curo a cierta dama aquí 515
-por hoy perdone el secreto
que os tuvo en Castilla un mes
hospedado.
DON GASPAR
¿A mí en Castilla?
DOÑA JERÓNIMA
Y de medio ojo en Sevilla
sé yo que os habló después, 520
no sé yo en qué gruta o fuente.
DON GASPAR
¿Esa mujer está aquí?
TELLO
Bruja es que viene tras ti.
DON GASPAR
¡Válgame el cielo!
DOÑA JERÓNIMA
¡Excelente!
hombre sois para engañar! 525
DON GASPAR
¡Yo! ¿Cuándo, cómo, o en qué,
si no la vi, la engañé?
DOÑA JERÓNIMA
¿No la vistes, Don Gaspar?
Pues si palabra la distes,
por lo menos, de marido; 530
si los dos Encas y Dido
en amor y engaños fuistes;
si huyendo requisitorias
la dejastes agraviada;
si os siguió, y apasionada 535
de que olvidéis sus memorias,
por vos a la muerte ha estado,
¿es nobleza, es cortesía
dar a Doña Estefanía
la pena que le habéis dado? 540
Vos causastes su tristeza:
por eso severa os mira,
os desdeña y se retira,
y no porque su belleza
agravie en tales empleos 545
como los que maliciáis
en mí: ¡ved cuán bien lográis
esperanzas y deseos!
Según esta información,
¿fiaros mi hermana puedo? 550
¡Muerto por vos en Toledo
un hombre, sin opinión
por vos Doña Micaela,
con cartas que sin firmar,
la intentaron desdorar! 555
¡Civil y baja cautela!
¡Una dama sevillana
que vuestros engaños llora,
y una embajatriz agora,
que despreciáis por mi hermana! 560
Dejáos de burlar bellezas,
y cumplid como cristiano,
caballero y castellano
palabras, contra bajezas
indignas de sangre tal, 565
antes que noticia den
a quien, cuando no por bien,
os haga casar por mal.
(Vase.)
DON GASPAR, TELLO.
DON GASPAR
¿Qué es esto, Tello? ¿Qué es esto?
TELLO
¿Qué sabe Tello? ¿Qué sabe? 570
Si tú tiraste ese cabe,
cumple el juego y paga el resto.
¡Bueno es que en Castilla goces
dama, sin saberlo yo,
que en el Alcázar te habló, 575
que vino aquí, y me des voces!
DON GASPAR
¡Yo en Castillal ¡Yo gozar!
¡Yo hospedado della un mes!
TELLO
Gallo en damas, y después
gallo en el no te acordar. 580
No es mucho lo que te importo.
¡Sin mí, y en tal ocasión!
Cinco ya las damas son;
no darás cinco de corto.
DON GASPAR
¿Vióse testimonio igual? 585
TELLO
Cumple palabras, no den
cuenta a quien, si no por bien,
nos haga casar por mal.
Sale QUITERIA.
-DON GASPAR, TELLO.
QUITERIA
(A DON GASPAR.)
Fidalgo, minha senhora
da janela vos escuita, 590
e vos tem vontade muita:
tomai e ficai embora.
(Dale un papel y vase.)
TELLO
¿Qué es frisar en borra aquí?
DON GASPAR
Dióme la moza un papel.
TELLO
Frisa y borra vendrá en él. 595
DON GASPAR
O yo estoy fuera de mí,
o algún embeleco es éste.
¿Yo palabra? ¿Yo hospedado...?
TELLO
Debe de andar encantado
el mundo en tiempo de peste. 600
¿No lees?
DON GASPAR
El cielo socorra
mi seso.
TELLO
Si da con él.
DON GASPAR
¿Yo palabra?
TELLO
Abre el papel,
y busca la frisa y borra.
DON GASPAR
(Lee.)
Tudo quanto vos fallou 605
meu irmaon, vos hei ouvido
pelo furaco escondido
da chave; se vos bradou,
naon temais, que vossa sou:
homem é o doutor mofinho; 610
zombai do seu escarninho,
pois sois fidalgo galante,
e vinde -cá d'hoje avante
se vos prace serdes minho.
¡Qué dulce y tierno papel! 615
TELLO
Derrítese el sebo luego.
DON GASPAR
¿Entiéndesle?
TELLO
Como a un griego.
DON GASPAR
Un almíbar es todo él.
TELLO
Deja, probaré a entenderle.
(Lee.)
Turrón cante...
DON GASPAR
¡Qué ignorante! 620
TELLO
Esto es turrón de Alicante.
DON GASPAR
Anda, necio: oye leerle.
(Vuelve a leer DON GASPAR.)
Tudo quanto vos fallou
meu irmaon, vos hei ouvido...
TELLO
¿Qué dice?
DON GASPAR
Que a lo escondido 625
nos ha escuchado.
TELLO
Fallou
¿es esconderse? Ya saco
poco a poco su sentido.
DON GASPAR
(Lee.)
Pelo furaco escondido.
TELLO
¡Malo! ¿Escondido y urraco? 630
Ésa es pulla, vive Dios.
DON GASPAR
¿Qué puIlas, desatinado?
TELLO
Lo mismo es que vil honrado.
Entendéos allá los dos,
porque yo, no hay darle alcance. 635
¡Furaco escondido! ¡Fuego!
¿Mas que te han de quemar luego?
DON GASPAR
Oye: leeréle en romance.
(Lee.)
«Cuanto mi hermano os habló
agora, todo lo he oído 640
por el espacio escondido
de la llave: si os riñó,
no importa; vuestra soy yo:
es mal acondicionado;
burláos dél, aunque enojado, 645
pues sois vos, en fin, mi amante,
y vedme de hoy adelante,
si mi amor os da cuidado.»
TELLO
Aun así no es tan bellaco,
puesto que algo libre viene; 650
mas eso ¿qué diablos tiene
que ver con blandón y urraco?
Salen DOÑA JERÓNIMA y QUITERIA,
de mujeres a lo castellano, cubiertas.
-DON GASPAR, TELLO.
DOÑA JERÓNIMA
(Aparte con su criada.)
Cúbrete bien, no te vea
la cara.
QUITERIA
Sáquenos Dios
destas cosas.
DON GASPAR
Estas dos 655
¿no son las que ver desea
mi amor?
TELLO
Ésta es la criada,
que es lo que me toca a mí.
DON GASPAR
¿No es Dofia Marta?
TELLO
No, y sí:
no, porque es carta cerrada; 660
y sí porque el sobrescrito
muestra que es suya la letra.
DON GASPAR
Todo mi amor lo penetra.
¡Mi Doña Marta!
DOÑA JERÓNIMA
Quedito,
hidalgo, y con cortesía. 665
TELLO
¡Castellano habla, por Dios!
DON GASPAR
¿No sois Doña Marta vos?
TELLO
¿Y tú la Martiña miña?
Como vemos la basquiña,
el frontispicio veamos, 670
y mi amo y yo conozcamos
a la Marta y la Martiña;
que si enseñas los ojetes
antes que de aquí me parta,
tú Martiña, y tu ama Marta, 675
y nosotros martinetes,
de ver medios ojos hartos,
vendrá nuestro San Martín,
Martina, en martes; y en fin,
seremos peña de Martos.
(La va a descubrir, y ella le da un bofetón.)
QUITERIA
Arre allá.
TELLO
Carrillos barre.
¡Ay! Quebróme una mejilla.
Con un jo topé en Sevilla,
y aquí me sacude un arre.
Jo debe de ser la herencia 685
que mi padre me dejó,
jo la mano que aojó,
jo toda mi descendencia,
jo yo en el talle y aliño,
jo el planeta que me apoya; 690
dime, pues eres mi joya:
a jo, a jo, y seré tu niño.
DOÑA JERÓNIMA
(A DON GASPAR.)
No soy la que imagináis,
aunque de su casa salgo.
Yo nací en Toledo, hidalgo: 695
en ella, si os acordáis
-que no haréis-, os tuve un mes
por mi huésped regalado,
en Sevilla descuidado
y en Portugal descortés. 700
Cumplid como hombre promesas
a inocencias toledanas,
o, pues burláis castellanas,
no deshonréis portuguesas,
y corresponded leal, 705
antes que noticia den
a quien, cuando no por bien,
os haga casar por mal.
(Vase con QUITERIA.)
DON GASPAR, TELLO.
TELLO
Por Dios, que prosigue estotra
el tema de su sermón. 710
DON GASPAR
¡Jesús! ¿Qué es esto?
TELLO
Visión.
No aguardemos que salga otra
y haya tercera papilla.
DON GASPAR
No lo acabo de entender.
TELLO
En el aire, la mujer 715
es la propia de Sevilla.
DON GASPAR
Y en el mismo es semejanza
de la hermana del dotor.
TELLO
Ella le contó su amor.
No es lo que te dijo chanza. 720
DON GASPAR
¿Mas que tienen que dar trazas,
Tello, que de aquí salgamos?
TELLO
¿Adónde, si las llevamos
tras nosotros como mazas?
(Vanse.)
[Sala en casa de DON ÍÑIGO.]
(Salen DOÑA JERÓNIMA, de mujer, con manto,
DOÑA ESTEFANÍA, de casa.)
DOÑA ESTEFANÍA
Quitaos el manto.
DOÑA JERÓNIMA
Naon posso; 725
que além de que a veros venho,
oculações muitas tenho.
DOÑA ESTEFANÍA
Quiéroos yo con más reposo.
DOÑA JERÓNIMA
Virei vagante outro día.
DOÑA ESTEFANÍA
¡Qué dello que os parecéis 730
a vuestro hermano! Tenéis
su misma fisonomía;
ninguna diferencia hay
en los dos; quedo admirada.
DOÑA JERÓNIMA
Parió-nos d'uma ventrada 735
ambos os dous nossa mai,
bem que elle nasceu primeiro.
DOÑA ESTEFANÍA
Es muy galán y curioso.
DOÑA JERÓNIMA
¿Quem? ¿elle? É muito mimoso,
com as damas feiticeiro, 740
gabaon-lhe os homens de savio,
querem-lhe as mulheres bem,
e pica alegrete, além
d'outras graças.
DOÑA ESTEFANÍA
Hace agravio
a su salud quien no llama 745
dotor que entretiene y cura.
¿Es amante por ventura?
¿Tiene en esta corte dama?
Decidme, ¿por quién se abrasa?
DOÑA JERÓNIMA
Eu vó-lo direi por certo. 750
Seus mimos tem aquí perto.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Aquí cerca?
DOÑA JERÓNIMA
Em vossa casa.
DOÑA ESTEFANÍA
Doña Marta de Barcelos,
en casa, ¿quién puede ser?
DOÑA JERÓNIMA
Anda por uma mulher 755
pendurado dos cabelos.
DOÑA ESTEFANÍA
¿En casa?
DOÑA JERÓNIMA
Sim; mas pergunto...
DOÑA ESTEFANÍA
Mujeres somos las dos:
hablad claro.
DOÑA JERÓNIMA
A serdes vos...
DOÑA ESTEFANÍA
¡Yo! ¿Estáis loca?
DOÑA JERÓNIMA
Tende punto; 760
naon vos acanheis taon cedo.
DOÑA ESTEFANÍA
Yo por dotor le conozco,
no más.
DOÑA JERÓNIMA
Desbajo comvosco.
Ouvi-me agora un segredo:
a serdes vos sua terceira, 765
eu vos prometo boa fé.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Yo su tercera?
DOÑA JERÓNIMA
Naon é
isto ser alcobeteira.
DOÑA ESTEFANÍA
Decid.
DOÑA JERÓNIMA
Dareis-lhe um bom dia
porque lhe magoam cuidados 770
de dous olhos orbalhados
de feitiços e alegría.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Conózcola yo?
DOÑA JERÓNIMA
¿Pois naon?
DOÑA ESTEFANÍA
¿Y está en casa?
DOÑA JERÓNIMA
¡Cómo rima!
DOÑA ESTEFANÍA
¿Es doña Leonor, mi prima? 775
DOÑA JERÓNIMA
Por ella morre meu irmaon.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Por doña Leonor?
(Aparte.)
-¡Ay cielos!-
¿y le ama doña Leonor?
DOÑA JERÓNIMA
É cavalleiro o doutor
dos Barbosas e Barcelos: 780
bem pode...
DOÑA ESTEFANÍA
Malogrará
su intento.
DOÑA JERÓNIMA
Tende cuidado,
porque se ja se ham casado,
Deos vos garde de feito é.
Salen QUITERIA y un PAJE.
-Dichas.
QUITERIA
Senhora, ¿tendes de vir? 785
PAJE
A vueseñoría llama
su padre.
DOÑA ESTEFANÍA
¡En casa, y su dama
mi prima!
DOÑA JERÓNIMA
Por vos servir,
falaremos outro día
de vagar, porque o doutor 790
ou tem de ser de Leonor,
ou de vossa senhoría.
(Vanse DOÑA JERÓNIMA, QUITERIA y el PAJE.)
DOÑA ESTEFANÍA.
DOÑA ESTEFANÍA
¿De Leonor tiene de ser,
o mío? Amor, esto sí.
Honra, lastimaos de mí. 795
Pues que nos dan a escoger,
más difícil es perder
la vida que no el amor.
Matóme doña Leonor:
¿qué mucho, cielos, será 800
que quien los pulsos le da
le dé la mano al dotor?
Si es, cual dicen, caballero,
¿qué pierdo? Mas ¿qué no gano?
Poco hay del pulso a la mano; 805
enferma estoy; sanar quiero.
Perdonará mi severo
padre, pues trujo a su casa
la peste que el alma abrasa,
en lugar de echarla fuera; 810
que si es fuego, donde quiera
que toca el amor, abrasa.
Sale DON RODRIGO. -DOÑA ESTEFANÍA.
DON RODRIGO
Enviábaos a llamar
el embajador, señora,
y entró una visita agora, 815
con que os ha de dilatar
no sé si diga pesares
o contentos; ya ha venido
la dispensación que ha sido
de mis encuentros azares; 820
si bien mi esperanza piensa
que, desconformes los dos,
mientras no dispenséis vos,
en balde el Papa dispensa.
DOÑA ESTEFANÍA
Pues de que dispense o no 825
el Papa, ¿qué azar o encuentro
interesáis vos?
DON RODRIGO
Soy centro
desa pena o gusto yo.
Quien vuestra salud gobierna,
por los pulsos conjetura 830
vuestro amor y mi ventura;
miráisme amorosa y tierna
desde el día en que entré a hablaros;
rigores notificáis,
cuando a don Gaspar miráis, 835
sin permisión para hablaros;
y como el amor no es cosa
oculta, juzga el dotor
que me habéis cobrado amor.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Quién juzga?
DON RODRIGO
El dotor Barbosa. 840
DOÑA ESTEFANÍA
¿Que yo amor os he cobrado?
DON RODRIGO
Me lo jura y certifica.
DOÑA ESTEFANÍA
Si ansí en todo pronostica,
ni es dotor, ni es acertado,
ni fe en él tener espero. 845
Nunca deis crédito a indicios
de quien es, mudando oficios,
dotor y casamentero;
que en eso la cura erró.
DON RODRIGO
Señora, aunque os cause enojos, 850
tal vez la lengua, y los ojos
mienten; mas los pulsos no.
Él viene, y sabrá mejor,
aunque negando fingís,
la dicha que me encubrís. 855
Al médico y confesor
se ha de decir la verdad;
con él podéis descubriros,
que aquí está para serviros
mi vida.
(Vase.)
DOÑA ESTEFANÍA.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Hay tal libertad? 860
Infaliblemente adora
el dotorcillo a mi prima,
y en fe que me desestima,
por terceros me enamora.
¡Ay sospechas indiscretas! 865
¿Vióse locura mayor?
¡Que me busque a mí un dotor
casamientos por recetas!
Sale DOÑA JERÓNIMA, de médico.
-DOÑA ESTEFANÍA.
DOÑA JERÓNIMA
Ocupaciones forzosas,
señora, me han impedido 870
el tiempo hoy de visitaros;
mas no el gusto de serviros.
Esta cátedra, de un rey
autorizada, el oficio
que ya en su cámara gozo, 875
los parabienes de amigos,
disculpen mi dilación,
si no basta haber suplido
doña Marta mi tardanza,
por ser mi retrato mismo. 880
¿Cómo, mi señora, estáis?
¿Qué hay de tristezas? Alivio
prometen esas colores;
venga el pulso.
DOÑA ESTEFANÍA
No le fío
de médicos licenciados 885
-licenciosos, dotor, digo-,
que su facultad profanan,
y donde son admitidos,
las doncellas enamoran.
DOÑA JERÓNIMA
¿Qué decís?
DOÑA ESTEFANÍA
¡Gentil aliño 890
de curar, descomponiendo
pulsos, del alma registros!
DOÑA JERÓNIMA
Pues ¿yo...?
DOÑA ESTEFANÍA
Pues ¿vos? Sois un santo.
¿Escribió en sus aforismos
remedios casamenteros 895
vuestro Galeno?
DOÑA JERÓNIMA
¿Os han dicho
de mí que soy buscabodas?
DOÑA ESTEFANÍA
No sé; pero don Rodrigo
dice que a vuestras enfermas
dais récipes de maridos. 900
Doña Leonor, a lo menos,
por ahorrarse del partido
que a los médicos se paga,
y previniendo peligros,
tendrá desde hoy adelante, 905
si yo su elección no impido,
que sí haré, dotor y esposo
en una pieza.
DOÑA JERÓNIMA
Háos mentido
el malicioso villano...
DOÑA ESTEFANÍA
Paso, dotor.
DOÑA JERÓNIMA
Mal nacido... 910
DOÑA ESTEFANÍA
Sí será: paso, dotor.
no os deshonréis a vos mismo.
DOÑA JERÓNIMA
Envidias de la opinión
con que estudios autorizo,
llevo cátedra a ignorantes, 915
y pulsos reales obligo,
con vos me descompondrán.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Descomponeros conmigo?
Antes de puro compuesto
se queja el recelo mío. 920
Allá con doña Leonor,
más alentado y festivo,
descompondréis pensamientos
y lograréis desatinos.
Pues, dotor casamentero, 925
desde agora os notifico
que no entréis en esta casa
ni aun a curar sus vecinos;
sabrá mi padre quién sois,
y os dirá si es permitido 930
que a mujeres de importancia
solicitéis con fingidos
y hipócritas pensamientos.
¡Bueno es, habiendo salido
de vísperas catedrático, 935
que por mi prima perdido,
la de prima pretendáis!
DOÑA JERÓNIMA
Mirad, oíd...
DOÑA ESTEFANÍA
Dotor, idos.
DOÑA JERÓNIMA
Señora, volved en vos.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Que no os vais? ¿He de dar gritos? 940
Desengañará mi padre
al rey, porque esté advertido
de quién entra en su palacio,
y a quién su médico hizo,
el riesgo en que están sus damas, 945
la ciencia que en otros libros
estudiáis, no de Galeno,
sino de Marcial y Ovidio.
¿Qué aguardáis?
DOÑA JERÓNIMA
Que no deis voces.
¿Luego a todo lo que os dijo 950
mi hermana de mí, dais fe?
DOÑA ESTEFANÍA
¿Pues no he de darla? ¿es testigo
vuestra hermana apasionado?
¿Paréceos que habrá fingido
engaños en daño vuestro, 955
si participa los mismos?
No os han de valer traiciones.
Salid.
DOÑA JERÓNIMA
Pasito, pasito.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Qué es pasito?
(A voces.)
¡Don Gaspar,
gente, pajes!
DOÑA JERÓNIMA
Paso, digo; 960
que soy doña Marta yo.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Quién?
DOÑA JERÓNIMA
La dotora.
DOÑA ESTEFANÍA
¡Oh qué lindo!
¡A mí mentiras de ciegos!
DOÑA JERÓNIMA
Miradine, y veréis si os finjo.
DOÑA ESTEFANÍA
Pues ¿cómo habláis castellano? 965
DOÑA JERÓNIMA
De mi hermano lo he aprendido.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Y quién me asegurará
desta duda?
DOÑA JERÓNIMA
El artificio
con que -para daros celos,
y el amor sacar en limpio 970
que mí hermano recelaba,
viéndole en vos escondido-
no ha un instante que mentí
Leonores que nunca ha visto,
bellezas que no apetece 975
y penas que no ha sentido.
Mal pudiera yo tan presto
darle por extenso aviso
de lo que nos ha pasado
a las dos, si aun no he tenido 980
tiempo de llegar a casa.
DOÑA ESTEFANÍA
Decís bien. Mas ¿qué artificio,
con qué traza, o en qué parte
pudo en hombre convertiros
tan brevemente?
DOÑA JERÓNIMA
El tener 985
una amiga y un vestido
de mi hermano en esta calle;
que así industrias apercibo.
DOÑA ESTEFANÍA
Dúdolo, dotor, o Marta;
dadme más ciertos indicios. 990
DOÑA JERÓNIMA
¿No os dije yo que o doutor
tinha aqui perto seus mimos?
Terceira dos seus amores
vos roguei serdes, porque isto
naon é ser alcobeteira; 995
o por derradeiro sino,
naon vos disse que á meu irmaon
tinha de chamar marido
Vossenhoría ou Leonor?
DOÑA ESTEFANÍA
Basta; es verdad, yo me rindo; 1000
en fin, ¿no está enamorado
de mi prima?
DOÑA JERÓNIMA
Fué, este arbitrio
sacasecretos, señora,
porque estaba, os certifico,
despulsándose por vos, 1005
Y con celos infinitos
de no sé qué don Gaspar,
vuestro amante y su enemigo.
DOÑA ESTEFANÍA
Aseguralde vos dél;
que ya que es fuerza el deciros 1010
verdades del corazón,
sólo a vuestro hermano estimo.
DOÑA JERÓNIMA
Beijo-vos as maons por elle.
DOÑA ESTEFANÍA
Pero, ¿por qué a don Rodrigo
le dijo que yo le amaba? 1015
DOÑA JERÓNIMA
Eso ignórolo.
DOÑA ESTEFANÍA
Aquí vino
necio de puro confiado,
ensartando desvaríos,
aparenciados muy bien,
pero muy mal recibidos. 1020
DOÑA JERÓNIMA
Él vendrá a satisfaceros;
pero, según he entreoído,
no sé qué dispensación
agora de Roma vino
en favor de un don Gaspar, 1025
que en fe de ser vuestro primo,
dicen que, vuestro consorte,
juntáis mayorazgos ricos.
DOÑA ESTEFANÍA
No juntando voluntades
el cielo, cuyo dominio 1030
es superior a preceptos,
¿qué importa?
DOÑA JERÓNIMA
Pierde el juicio
mi hermano por esta causa.
DOÑA ESTEFANÍA
Luego ¿lo sabe?
DOÑA JERÓNIMA
Halo visto
en los ojos del dichoso, 1035
todos gozo y regocijo.
DOÑA ESTEFANÍA
Pues decilde de mi parte
que si, cual pienso, averiguo
la calidad que promete,
por él dejará al rey mismo. 1040
Decilde que soy diamante.
DOÑA JERÓNIMA
¿No vale, más que decirlo,
asegurarle primero?
DOÑA ESTEFANÍA
¿Cómo?
DOÑA JERÓNIMA
Atajando peligros,
y dándoos los dos las manos. 1045
DOÑA ESTEFANÍA
¿Luego?
DOÑA JERÓNIMA
Luego.
DOÑA ESTEFANÍA
Necesito
saber primero si es noble.
DOÑA JERÓNIMA
Eso yo os lo certifico.
DOÑA ESTEFANÍA
Vos sois parte apasionada.
DOÑA JERÓNIMA
Pues mientras buscáis testigos, 1050
ganaráos la bendición
doña Leonor.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Cómo?
DOÑA JERÓNIMA
Quiso
desposarse ayer con él;
y agora, a lo que colijo,
los dos juntos tratan dello, 1055
por prevenir descaminos.
DOÑA ESTEFANÍA
¡Ay, cielos! Pues, engañosa
Circe, ¿vos no me habéis dicho
que ni a Leonor apetece,
ni la visita, ni ha visto? 1060
DOÑA JERÓNIMA
Eso fué por aplacaros,
y a la postre, preveniros
con lo uno y con lo otro;
que el dilatarlo es martirio.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Hay semejante embeleco? 1065
¿Mujer con tantos hechizos?
¿Hombre con tantos engaños?
¡Con Leonor! ¡Ay, celos míos!
No estéis más en mi presencia.
Iré, cuando no a impedirlos 1070
su loco amor, a ofenderlos,
afrentarlos, perseguirlos.
DOÑA JERÓNIMA
Quedo, señora.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Qué es quedo?
¿No os vais? Haré desatinos.
DOÑA JERÓNIMA
Quedo, que soy el dotor: 1075
¡cuerpo de tal! no deis gritos.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Quién sois?
DOÑA JERÓNIMA
El dotor Barbosa.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Ya empieza otro laberinto?
DOÑA JERÓNIMA
¡Bravos sustos os he dado!
DOÑA ESTEFANÍA
Hombre en mujer embebido. 1080
acabemos de saber
uno u otro.
DOÑA JERÓNIMA
Yo eso pido.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Quién eres?
DOÑA JERÓNIMA
Vuestro dotor,
que dos veces os visito,
una en nombre de mi hermana, 1085
y otra agora en nombre mío;
como mujer la primera,
y ésta en traje masculino.
DOÑA ESTEFANÍA
Luego ¿no fué doña Marta
la que estuvo antes conmigo? 1090
DOÑA JERÓNIMA
No, mi señora, su traje
solo en mí sostituído,
mi poca barba y edad,
el fuego en que me derrito,
la dispensación severa, 1095
los celos siempre atrevidos,
en mujer me transformaron.
Naon vos acanheis sol minho,
meus olhos, meu coraçaon,
minha gloria, meu feitiço, 1100
mana minha, cravo d'ouro;
eu sou vosso rapazinho.
Satis sit, crucior pro te
usque ad animi deliquium.
A requiebros castellanos, 1105
portugueses y latinos,
¿qué desdén será bastante
a enojarse y resistirlos?
Venga esa mano, y quedemos
(Tómala.)
en paz, casados y unidos, 1110
como os pombo rulhadores
acostumam, em seus ninhos.
¿Dáismela?
DOÑA ESTEFANÍA
Vos la tomáis.
DOÑA JERÓNIMA
¿Como esposo?
DOÑA ESTEFANÍA
No sé.
DOÑA JERÓNIMA
Insisto
en esto, o enojaréme. 1115
¿Como esposo? Decid.
DOÑA ESTEFANÍA
Digo
que sí.
DOÑA JERÓNIMA
¿Que sí? Eu a beijo.
(Bésasela.)
Embuçando meus focinhos,
(e sentindo mais amor
do que amantes tem sentido), 1120
desde Píram até Paris,
desde Adonis té Narciso.
Salen DON GASPAR y DON RODRIGO.
-Dichas.
DON GASPAR
(Aparte a DON RODRIGO al salir.)
No reñiremos por eso,
si el dotor verdad ha dicho;
mas dúdolo, que es su amante. 1125
DOÑA JERÓNIMA
Pues, don Gaspar, don Rodrigo,
¿qué es esto?
DON RODRIGO
Una competencia.
DON GASPAR
DOÑA ESTEFANÍA
Es verdad;
que casamientos con primos,
o se logran siempre poco,
o no se alegran con hijos.
DON GASPAR
Yo pretendo a doña Marta. 1135
DOÑA JERÓNIMA
Yo por su esposo os admito;
mas ha de ser hoy la boda.
DON GASPAR
Eso es lo que yo os suplico.
Llamalda.
DOÑA JERÓNIMA
Escuchad aparte.
(Apártale.)
¿Queréis casaros conmigo? 1140
DON GASPAR
¡Jesús, dotor! ¿Estáis loco?
DOÑA JERÓNIMA
No juzguéis por los vestidos
la persora. Doña Marta
soy.
DON GASPAR
¿Qué decís?
DOÑA JERÓNIMA
He querido
con esta transformación 1145
asegurar el partido
del dotor mi hermano.
DON GASPAR
¿Cómo?
DOÑA JERÓNIMA
Tiene muchos requisitos;
dejaldos para después.
Ya sabéis, como os lo he escrito. 1150
lo que os quiero, y la palabra
que me habéis dado.
DON GASPAR
Imagino
que de mí os estáis burlando.
DOÑA JERÓNIMA
¿Es porque mudo de estilo,
y no os hablo en portugués? 1155
Pois catai os olhos -minhos,
que ontem vistes um a um,
a boca, os dentes, e o riso.
DON GASPAR
Basta, entregadme esa mano.
DOÑA JERÓNIMA
(Dásela.)
Esta foi a que perdido 1160
vos teve a volta primeira.
DON GASPAR
Es la verdad.
DOÑA JERÓNIMA
Dom Rodrigo,
chegai a ser testemunha
de que é Dam Gaspar marido
de Dona Marta.
DON RODRIGO
Serélo. 1165
DOÑA ESTEFANÍA
Yo y todo, y si os apadrino,
me tendré por venturosa.
Gocéisos alegres siglos.
DOÑA JERÓNIMA
(A DON RODRIGO.)
Isto é feito. Agora vos,
cavalleiro, agradecido; 1170
dai a maon a vossa dama.
DOÑA ESTEFANÍA
¿A mí?
DOÑA JERÓNIMA
(Aparte a ella.)
Facei o que pido;
zombaremos delle um pouco.
DOÑA ESTEFANÍA
Ya vos ¿no sois dueño mío?
¿No sois mi esposo?
DOÑA JERÓNIMA
Por eso; 1175
que pues no corre peligro
nuestra boda, quiero yo
que la alegren regocijos.
DOÑA ESTEFANÍA
(Dando la mano a DON RODRIGO.)
Por el dotor os la entrego.
DON RODRIGO
Conjeturo por indicios 1180
verdades: débole mucho:
¡qué venturoso que he sido!
Salen DON ÍÑIGO, QUITERIA, DON MARTÍN, TELLO.
- Dichos.
QUITERIA
Donde el honor se atraviesa,
es traición el encubrirlo.
Vuexcelencia lo remedie. 1185
DON ÍÑIGO
Dotor, mirad si ha perdido
el juicio esta mujer,
y curalda.
QUITERIA
Lo que afirmo
es la verdad pura y clara.
TELLO
¡Qué buena era para vino! 1190
DOÑA JERÓNIMA
¡Martinha!
QUITERIA
Ya se acabaron
las Martinas y Martinos.
Tu hermano murió en Pamplona
deshojando francos lirios,
y su mayorazgo heredas; 1195
tus deudos y sus amigos
en Sevilla te echan menos,
y últimamente han sabido
que asistes en esta corte.
En busca tuya tu tío 1200
viene, extrañando disfraces,
y está ya en casa.
DOÑA JERÓNIMA
Prodigios
de amor disculpen finezas.
Don Gonzalo, hermano mío,
murió por su Rey y patria: 1205
a Don Gaspar he querido
desde que fué huésped nuestro;
él solo médico me hizo,
y él, en fin, es hoy mi esposo.
DON ÍÑIGO
Luego ¿sois mujer?
DOÑA JERÓNIMA
He sido 1210
quien a la naturaleza
con mi industria he contradicho.
DOÑA ESTEFANÍA
Luego ¿no tenéis hermana?
DOÑA JERÓNIMA
El amor la ha convertido
a ella y el dotor Barbosa 1215
en un cuerpo.
DOÑA ESTEFANÍA
¿Hay desatino
semejante?
DOÑA JERÓNIMA
Don Gaspar
es mi esposo, merecido
a precio de estudios tantos,
tanto disfraz y suspiro. 1220
DON GASPAR
Yo me tengo por dichoso.
DON RODRIGO
Merezca, pues, Don Rodrigo
suceder en esta plaza
a Don Gaspar.
DON ÍÑIGO
Deudo mío
sois también: si viene en ello 1225
mi hija...
DOÑA ESTEFANÍA
Tu gusto sigo,
siquiera porque el Barbosa,
de dotor, fuá su padrino.
TELLO
Pues, Martiña...
QUITERIA
Dí Quiteria.
TELLO
Quiteria, para el domingo, 1230
porque hoy todos no se casen,
delante el cura te cito.
DON ÍÑIGO
¡Jesús!; admirado voy.
DOÑA JERÓNIMA
Amor médico me hizo,
y el Amor médico es éste: 1235
si os agrada, decid ¡vítor!