El adulterio en Esparta
El adulterio en Esparta.
Preguntó un estranjero á Gerades, lacedemonio:
— ¿Por qué Licurgo no ha pronunciado ley alguna contra los adúlteros?
— Porque no los hay enLacedemonia, respondió.
— Pero en caso de haber alguno, replicó el estranjero, ¿cómo se le castigarla?
— Seria condenado, contestó Gerades, á alimentar un buey tan grande, que desde la cimadel monte Tarjetes pudiese, alargando el cuello, beber en el rio Eurotas.
— Pero, ¿cómo, repuso el estranjero, podria haliarse un buey de tanta corpulencia?
— Mas fácil seria eso, dijo Gerades, que hallar un adúltero en Esparta.