El Puñal del Godo: 05

El puñal del godo, Drama en un acto de José Zorrilla
del tomo dos de las Obras completas ordenadas por Narciso Alonso Cortés.

EL PUÑAL DEL GODO de José Zorrilla Drama en un acto


ESCENA V editar

DON RODRIGO

ROD.

Bien dice ese leal. Más vale al cabo
caer en una lid por causa extraña,
que, de servil superstición esclavo,
llorar imbécil la perdida España.
Saldré otra vez al agitado mundo
con mi contraria suerte por herencia,
velando en el misterio más profundo
el secreto fatal de mi existencia.
Nada soy, nada tengo, nada espero;
encerrado desde hoy en mi armadura,
seré en mi propia causa aventurero
sin esperar jamás prez ni ventura.
Mas al caer lidiando en la campaña,
al pueblo diga mi sangrienta huella:
«Ved: si no supo defender a España,
supo a lo menos sucumbir por ella.»
Mas ¡ay triste de mí! Mi pueblo mismo,
que me tiene en horror, con frío encono
me verá descender hacia el abismo
como me ha visto descender del trono.
Sí, aplaudiendo tal vez mi sino adverso…
Y todo es obra tuya, ¡conde infame!
Por ti desprecio soy del universo:
fuerza es que sangre nuestra se derrame.
(Viendo el puñal)
¡Mas, Dios santo, ahí estás! Húyeme, aparta,
sueño fascinador, que esquivo en vano.
Nunca de sangre de los godos harta,
esta daga fatal busca una mano.
La de una de ambos… tigre vengativo,
ser exterminador de mi familia;
uno sólo de entrambos quede vivo,
veamos el infierno a quién auxilia;
Mi razón, mi creencia lo repele;
mas nunca echar de mí puedo esta idea;
ese día fatal ¡oh infierno! impele;
tráenosle de una vez, y pronto sea.
Vértigo horrible el corazón me acosa,
sed de su sangre el corazón me irrita…
O huye por siempre, pesadilla odiosa,
o ante mis ojos ven, sombra precita!
(Ábrese la puerta con ímpetu, y al par que ilumina el fondo un relámpago, entra en la escena el conde don Julián.)