Despertar (para el álbum "Guido Spano")
DESPERTAR
Allá van como espectros vagabundos,
Girones de tiniebla, rezagados
Semejan de un ejército en derrota
Gigantescos soldados...
Huye la tempestad, huyen las sombras.
El sol, cual si á la vida despertara,
Centelleando aparece en el Oriente,
Y los pálidos astros de la noche
Parece que se fueran desmayando
Vencidos por su luz resplandeciente.
¡Quién sabe para cuantos desgraciados
Tiene sombras el día!
¡Oh sol de siempre, que alumbrando surges
El mismo cuadro, sin variante alguna!
¡Oh, sol! Tú que impasible
Penetras al tugurio miserable,
Donde quedó dormido para siempre
Quien tuvo á la miseria por amigo,
Aquél que en noche aciaga,
Cuando el viento rugía despiadado,
En la pobre buhardilla
¡Le sobró el hambre y le faltó el abrigo!
Si has de salir á iluminar miserias,
¿Por qué no ocultas tus dorados rayos
Para siempre en la noche de la nada?
¡Deja que reinen por do quier las sombras,
Sobre la tierra helada!
Y entre tanto, el poeta que ha bebido
En la fuente de todos los dolores;
El que maldice y llora
Con todos los que lloran y maldicen;
El que vive en perpetuo desvarío
Porque entiende que el mundo es un infierno
Que nos cuesta mil lágrimas por hora,
Filosofa y medita
Sobre el dolor humano:
Que todas las congojas de la tierra
Tienen ¡ay! un refugio entre su pecho,
¡Pórque su pecho á todas las encierra!