Cancionero (Petrarca)/Dulces durezas, plácidos desvíos
Dulces durezas, plácidos desvíos,
llenos de casto amor y de blandura;
desdenes que templaron la locura
de afanes que hoy entiendo ya baldíos;
gentil hablar, con que rehusó mis bríos
con suma honestidad y donosura;
flor de virtudes, fuente de hermosura,
que fuera de mí echó mis desvaríos;
mirar divino que me da contento;
hoy fiero en frenar alma así atrevida
a aquel que cambia con piedad de intento,
hoy presto a confortar mi frágil vida:
esta mudanza ha sido el fundamento
de la gloria que ayer tuve perdida.