Cancionero (Petrarca)/De tan noble manjar nutro el sentido
De tan noble manjar nutro el sentido
que a Júpiter no envidio la ambrosía,
pues basta el ver para que en alma mía
de todo otra dulzura llueva olvido.
Si de ella, por llorar, gusto el sonido
y dentro escribo en mí su melodía,
raptado sin saber donde Amor guía,
doble dulzura en sólo un gesto mido.
Que en fin aquella voz, al cielo suave,
suena palabra tan hermosa y diestra
que imaginar, quien no la oyó, no sabe.
Tan bello y breve espacio así demuestra
cómo visiblemente junto cabe
cuanto arte, ingenio, tierra y cielo muestra.