Cancionero (Petrarca)/Alegres flores, venturosas hierbas
Alegres flores, venturosas hierbas,
que mi señora vagorosa toca;
prado, que voz escuchas de su boca
y estampa aún de su pie bello preservas;
árboles y ramas aún acerbas;
violetas de color menguada y poca;
umbrosa selva, a la que el sol sofoca
y altiva con sus rayos te conservas;
oh valle regalado, oh río puro,
que bañas en tus aguas esta prenda,
cobrando así el encanto más seguro;
¡cuánto os envidio tan honesta hacienda!
No habrá en vosotros más ya ripio duro
que al fuego de mi llama arder no aprenda.