Vos, de Pisuerga nuevamente AnfrisoVos, de Pisuerga nuevamente AnfrisoLope de Vega
- A don Francisco de Quevedo
- Soneto 128
Vos, de Pisuerga nuevamente Anfriso,
vivís, claro Francisco, las riberas,
las plantas atrayendo, que ligeras
huyeron de él, con vuestro dulce aviso.
Yo triste en vez de Dafne a Cipariso
tuerzo en la frente, y playas extranjeras
a vista de las ánglicas banderas
donde Carlos tomó su empresa, piso.
Vos coronado de la excelsa planta
por quien suspira el sol, no veis, Francisco,
si canta la Sirena o Circe encanta.
Y yo sin mí y sin vos atado a un risco,
no habiendo hurtado al sol la llama santa,
sustento de mi sangre un basilisco.