Visita de amor
Unas coplas muy cansadas, con muchos pies arrastrando, a lo toscano imitadas, entró un amador cantando, enojosas y pesadas Cada pie con dos corcovas, y de peso doce arrobas, trovadas al tiempo viejo. dios perdone a Castillejo, que bien habló de estas trovas. Dijo Amor: «¿dónde se aprende este metro tan prolijo, que las orejas ofende? —Algarabía de allende—: el sujeto frío y duro, y el estilo tan escuro, que la dama en quien se emplea duda por sabia que sea, si es requiebro o es conjuro» «Ved si la invención es basta, pues Garcilaso y Boscán, las plumas puestas por asta cada uno es un Roldán, y, con todo, no le basta; yo no alcanzo cual engaño te hizo para tu daño, con locura y desvarío, meter en mi señorío moneda de reino extraño» «Con dueñas y con doncellas —dijo Venus—, ¿qué pretende quien las dice sus querellas en lenguaje que no entiende él, ni yo, ni vos, ni ellas? Sentencio al que tal hiciere que la dama por quien muere lo tenga por cascabel, y que haga burla dél y de cuanto le escribiere.»