Versos sencillos (J. Martí): XVII

XVI
Versos sencillos
de José Martí
XVII
XVIII


Es rubia: el cabello suelto
Da más luz al ojo moro:
Voy, desde entonces, envuelto
En un torbellino de oro.

La abeja estival que zumba
Más ágil por la flor nueva,
No dice, como antes, "tumba";
"Eva" dice: todo es "Eva".

Bajo, en lo oscuro, al temido
Raudal de la catarata;
¡Y brilla el iris, tendido
Sobre las hojas de plata!

Miro, ceñudo, la agreste
Pompa del monte irritado:
¡Y en el alma azul celeste
Brota un jacinto rosado!

Voy, por el bosque, a paseo
A la laguna vecina;
Y entre las ramas la veo,
Y por el agua camina.

La serpiente del jardín
Silba, escupe, y se resbala
Por su agujero: el clarín
Me tiende, trinando, el ala.

¡Arpa soy, salterio soy
Donde vibra el Universo;
Vengo del sol, y al sol voy;
Soy el amor: soy el verso!