Vanitas
VANITAS.
¡Oh pobre humanidad! el golpe fiero
De la implacable mano de la muerte,
En instante brevísimo convierte
En humo y nada tu esplendor primero.
Gigante roble que miró altanero
Las recias tempestades, y que fuerte
Por siempre se creyó, la infausta suerte
Obtiene de la flor: polvo es ligero!
¿Por qué si pasas como sombra vana
Y tu poder tan presto desparece,
Tu mente llena vanidad insana?
¡Oh loca humanidad! te desvanece
La vil lisonja que en mentir se afana,
Y necia olvidas lo que no perece.