Una vez habló Dios el día terceroUna vez habló Dios el día terceroLope de Vega
- Soneto IX
Una vez habló Dios el día tercero
palabra de virtud y omnipotencia,
y no fue menester que a la obediencia
le reiterase lo que habló primero.
Mientras la habitación en su hemisfero
durare de los mixtos, su sentencia
por toda la mayor circunferencia
conservárase hasta su fin postrero.
Puso ley a las aguas convenible,
la tierra descubrió, dio al aire esfera,
y al fuego duración sin combustible.
Y yo, que por tener la razón fuera,
a sus preceptos, ¡oh rigor terrible!,
rebelde estoy, como la vez primera.