Un novillo feroz y un fuerte toro

Un novillo feroz y un fuerte toro
de Hernando de Acuña


 Un novillo feroz y un fuerte toro   
 lidian delante su becerra amada,   
 y mirábalos Silvia descuidada,   
 de gracia y de beldad rico tesoro,   
 

 cuando por la ribera un sacro coro  
 de ninfas ve venir, y en su llegada   
 fue de ellas mi pastora coronada   
 de flores, que eran perlas sobre el oro.   
 

 Y como el fuerte vencedor furioso   
 dio alegre fin a la obstinada empresa,  
 zampoña no quedó que no tocase,   
 

 diciendo: «¡Oh bien nacido y venturoso   
 Silvano, si tu llanto, que no cesa,   
 con fin tan venturoso se acabase».