Tres ruiseñores
BARBIERI
Ruiseñor cuyo canto es nuestra patria;
sus obras son el español poema;
el madrigal dulcísimo que cruzan
los amantes nocturnos en la reja;
el árabe cantar; el poderoso
grito de libertad e independencia;
el ritmo cadencioso y elocuente
que forman con sus pasos nuestras bellas;
la hermosa Andalucía; los fulgores
que en los cuadros de Goya centellean,
y el murmurar del aire cuando agita
la española bandera.
BÉCQUER
Es su canto la luz: el horizonte
lleno de tristes sombras y de estrellas;
el gemido de un pecho destrozado;
los amores del lirio y la azucena;
el himno que murmuran las estatuas
en sus anchos sarcófagos de piedra;
la rosa y oro, espléndidos colores
que Ticiano ostentaba en su paleta;
el rumor de las hojas en otoño;
del cisne melancólico la queja,
y el silbido del viento entre los sauces,
y las tumbas desiertas.
GAYARRE
Es su voz mundo inmenso de armonía;
«el son valiente de la trompa épica»
el suspiro de un alma enamorada;
las sonrisas; las lágrimas sangrientas;
el buril primoroso de diamante
que en el gastado corazón penetra
el placer; la bondad; el sentimiento;
el perfume y color de las violetas;
las preciosas canciones de Petrarca
el estridente grito de la guerra,
y un mar de luz y notas que en sus pliegues
arrastra ricas perlas.