Tratado de la pintura/LXXXIV
§ LXXXIV.
editarNingún color que reflecta en la superficie de otro cuerpo la tiñe de su propio color, sino que este será una tinta compuesta de todos los demás colores reflejos que resaltan en el mismo parage. Por ejemplo: reflejando el color amarillo A en la parte del cuerpo esférico C O E, é igualmente el azul B, será el reflejo mixto del amarillo y azul; de modo que si el tal cuerpo esférico era blanco, quedará teñido en aquel parage de verde; porque de la mixtión del amarillo y azul resulta verde hermoso. Figura VI.