Teoría de la felicidad humana

Almanaque de espiritismo (1873)
Teoría de la felicidad humana
de S. FLorencio Redondo.

Nota: Se ha conservado la ortografía original.

—"'I-1sz*r*-—

PROVERBIOS.

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TEORÍA DE LA FELICIDAD HUMANA.

Buscad pues primeramente el reino da Dios, y su justicia y todas estas cosas os serán añadidas. San Mateo, Cap. VI, v. 3o.

Y yo to digo: Que no te afanes ni desvela, oh humanidad, par adquirir sabiduria y poderío, pues no cabe poder más grande y sabiduria más perfecta que la que en ti hay de toda eternidad.

Sabiduría y poder posees en grado infinito, propiedades eternas, como eterno es tu ser, y no solo no to evitaron el caer, sino que dichas virtudes fueron causa de tu caida.

Tú ares tan capaz de concebir exenciones, como lo eres de apagar y deshacer con un débil soplo esas miriadas de lucientes solos y combinaciones estelares que admiran. Si, no lo dudes; el más débil de tus pensamientos es mas grande que esn creacion que hoy contemplen. Eee universo que tanto to impone, que “¡No te sorprende, y que muchas voces edo- m con religioso culto, es obra tuya, engendro de tu delirio.

Asi es elle, y es! es el mónstruo de muerte, mio legitimo de idea mortal... Lc muerte es la ley de es: netunlm.

No ¿“(109. mimo. que ú tu concepcion profun- da y mir-edu penetrante, lo mismo Que ii tu in- men” Ind", nudo se resiste y oculta, pues tú mnoces y ves el vacio no sun como ves y conocen cl 0011i nulo desém y leyes que constituyen el sue.

Quo todo esto eres aunque hoy lo iguoras, yo en verdad te lo aseguro; que todo este serás, ya lo preeientes; y que todo esto fuiste, yn lo verás. 00m0 verás tambien que fué la causa de que cayeros.

Escuche. y mil-u como sucedió...

Y el ver que te ere ten sencillo concebir cree- ciones sin cuento, bellos y periodos como perfecta y belle ern tu mente. ul contemplar y ver que los eternos y universales elementos dejebnn eu fuen- te originaria por complacerte-puee con tu non- riento y humildes como esclavos convertían en hecho tn pensamiento teu pronto como tu espi- ritu acusaba tu deseo-te engrelete.

Y, por último, al considerar que lo más débil que en ti hebíe-el espiritu. primera farm en el decálogo universal, puc: e: la que/arma y sostiene los mundos-era mas potente que todos los ele- mentos de creacion reunidos, te creiete dueño del absoluto , y soberbio con tu saber y orgulloso con tu poder, ceistc en el egoísmo, queriendo bncer abstraccion del sér más perfecto que en el abso- luto hey . esto ee: LA Pnovmexcu.

Tal fue tu único y primer error.

De entonces mi. erróneo ee cuento piensas y ejecutas, lógico en verdad, pues tiene el error por bese.

Y ¡i tales errores to condujo ln lógica por equal primero, que nos llegado hasta perder le concien- cie de ti mismo. _

Tanto, que hoy no subes ni lo que ¡nieto nl 10 que eres y serás, eeto es: Ignore: de dónde eine: y adónde occ. '

Admitirás como exiomático cuento hasta nqm llevo enunciado ein más que Ineditos uu momento y te hagas estas preguntes: ¿Me conozco? ¿Pue' do conocerme?

Y sin vacilar responderús: No me conozco, pero presicuto y comprendo que puede conocerme.

Sigue preguntando en forme de corolal‘io-bSÍO een bese que ee un hecho verdadero-y este pro- cedimiento te dará una formule que preeiserai la cuestion.

Pruebe.

Si puedo conocerme, ¿por qué no me conozco?

Por el estudo en que me encuentro, te verás obligado á responder-

Sigue.

Si el estado en que me encuentro ee la. cansa de lo que ignoro, ¿cuál es el principio de 65°“ cause?

Llegutc ú fijar con precision el tema . 3' "10m sentirás ln necesidad de ndmitir como respuesta mi enunciado.

Que es en resúmen: El origen de tu pecado y sus naturales consecuencias-impotencia r’ ¡{IM' Macedonian-ind tu mismo poder 3’ N‘JÏ’ duríe, mestu falto de umor.

Porque el que puede y sabe y no ame, de Md“ le sirve absoluto su inem y ciencia, per más que eeuu nemilimitedne, pues ignora lo mejor, deeconoee lo que mes encanta, anne y voan mm.

Meditn y verán que, fi quien no subo ni puede amni- le falte un elemento necesario para ser per recto, puesto que carece de ln clave superior que existe, clave que resuelve el problema de le union de los aérea de le. mnncrn mas sencilla v cucun- tndorn: Larimpcllc. . . . . . . . . . . .u. . . . .

Admítido que el hombre ee sebío y poderoso. y que sólo está falto de bondad para obtener ln perfeccion, grado el que debe espirnr constante - mento, no le resta mas que adquirir aquello de que carece, y hner encontrado el reino de Dios.

Animo, pues, y 6 buscarlo que fijamente lo hallará: si tú quieres . . . . . . . . . . . . . . . .

Tc veo triste y deemuyado, actitud que se re- nejn en tu espíritu, como tambien ee agita un pensemiento, espmeion fiel de tu deseo; te crece impotente pere descubrir por tí mismo el camino más rec” y 5880"! que haya para lograr ln per- feccion.-título indispensable para ser admitido en ¿501W Millor-3’ quisieras te lo indicuc yo, si cs que lo conozco. Lógica es tu tristeza, justo y legitimo tu deseo. El no mfisfacerte seria faltar á esa bondad que tanto encomío, por lo cual corro procureso acou-testarte.

He aqui mi respuesta: Conozco bien el camino y voy a señalártelo, tú tambien lo conocerás por las señas.

Ea, aunque penoso, corto; dc fácil acceso, nun- que cscabroso; y si escelloey peligros tiene, nin- guno hay superior á. tus fuerzas.

Cerca lo tienes..... Míralo tú..... Si... Eres tú mismo..."

Los escenas y peligros son tus pasiones; el cu- mino el sufrimiento.

Sufre y domina tus pasiones y habrás resuelto el problema; y sino , que oiga el que oidos tenga; oye, pues que oidos tienes.

Para dominar las pasiones se lucha, porque la pasion arrastre al hombre al objeto que la produce y se goza en ello.

El que lucha contre su gusto, padece; y por lo tanto siente necesidad de consuelo.

Quien siente esta necesidad y es consulado agradece, y el que agradece ya tiene el amor en gérmen.

Da condiciones á este germen y tomará desarrollo.

Busqucmos y las hallaremos en el sufrimiento mismo; que unasasrfi impuesto y otras voluntario.

Primer supuesto-espiacion:—Haz sufrir al hombre con los objetos que le producen la pasion y los aborrecerá. 6 lo que es lo mismo se irá desprendiendo de ellas.

Verás que a medida que su desprende de sus afecciones va adquiriendo cualidades medianímicas.

Y cuando se desprende de todas ellas se reconcentrará en si mismo y se hallará espiritualizndo.

Mas ya el hombre espiritual disfruta de los condiciones que le son propias.

Esto es; entra en la plenitud de sus fiieultndes, y entonces comprende lo que le falta, y cuál fue la causa dc su caida, y hace esfuerzos para adquirir aquella como para evitar esta.

Ve tambien que no se consigue este sino Amndo á Dios sobre lada: la: cara: y flprógima como a si mimo.

Esta leccion la aprende el hombre del Dios mismo, que en cambio de la ofensa colma de bondades a sus hijos.

Convencido el hombre de la necesidad de amar á Dios, á sus hermanos, sólo le resta probar á los demás seres para enseñanza y á si mismo lu ver- dad de este convencimiento.

Para que al individuo pueda probar esto y responder de sí mismo cs preciso que tome lu cruz de la abnegacion y apuro la copa delos sinsabores, sufrimiento voluntario.

Esta cruz no podrá llevarla nadie si antes no se convence de las ventajas que trae.

Convencido de su utilidad, no solamente no la rehuye sino que u acepta y aun la busca.

Y por último: El que tomare esta cruz y la lle- vare hasta el Calvario, este será salvo , porque ya dueño y señor de su ser, y libre de todo error, volverá á disfrutar de la gloriosa potestad que tuvo antes del principio.

Y este es el Fin.

S. FLorencio Redondo.