Subo con tan gran peso quebrantado
Subo con tan gran peso quebrantado por esta alta, empinada, aguda sierra, que aun no llego a la cumbre cuando yerra el pie y trabuco al fondo despeñado. Del golpe y de la carga maltratado, me alzo a pena y a mi antigua guerra vuelvo ¿mas qué me vale? Que la tierra mesma me falta al curso acostumbrado. Pero aunque en el peligro desfallesco no desamparo el paso; que antes torno mil veces a cansarme en este engaño. Crece el temor y en la porfía cresco, y sin cesar, cual rueda vuelve en torno, así revuelvo a despeñarme al daño.