Soneto cuarto del caballero
Necio, atrevido y loco me apellida, Fili, tu injusta condición ingrata, y con infames títulos maltrata la más noble pasión y bien nacida. Emplea en mí tu cólera encendida, abrasa un corazón que te retrata, y consume, si te es empresa grata, la ya torpe memoria de mi vida. Ya aborrezco el vivir, pues inhumana segunda causa das a mi tormento, por que acabe mi vida de esta suerte: Acción por todos términos tirana ensangrentarte en mi aborrecimiento, sobrando tu desdén a darme muerte.