Soneto con estramboteJuan Díaz Rengifo
Este grandioso Túmulo erigido,
fúnebre pompa de cristiano afecto,
al más hermoso, y al mayor sujeto
que injusto triunfo de la Parca ha sido,
este consigo mismo competido,
de lealtad, y de amor piadoso efecto
funesto Ocaso es hoy del más perfecto
sol, que gozar España ha merecido.
Con un golpe mortal, en breve instante
al gran Philipo, su divina Aurora,
la Lis francesa, la beldad galante,
quitó, llevó la Muerte robadora:
Mas si en eterno imperio brillante,
tantos de gloria grados atesora.
Para qué España llora
a Isabel de Borbón, que muerta yace,
si al Cielo Fénix inmortal renace.