Sesiones de los Cuerpos Lejislativos de la República de Chile/1836/Sesión del Congreso Nacional, en 1 de junio de 1836

Sesiones de los Cuerpos Lejislativos de la República de Chile (1836)
Sesión del Congreso Nacional, en 1 de junio de 1836
CONGRESO NACIONAL
SESION DE APERTURA, EN 1.ª DE JUNIO DE 1836
PRESIDENCIA DE DON GABRIEL JOSÉ DE TOCORNAL


SUMARIO. —Nómina de los Senadores i Diputados asistentes. —Asistencia del Presidente de la República. —Mensaje del Supremo Majistrado. —Contestacion del Presidente del Senado. —Acta. —Anexos.

El Ministro del Interior lee un Mensaje a nombre del Presidente de la República, i le contesta brevemente el Presidente del Senado. (Anexos núms. 1 i 2. V. Cámara de Senadores en 22 de Junio de 1837.)


ACTA editar


Sesion de las cámaras reunidas en 1.° de junio de 1836.

En la ciudad de Santiago de Chile, a primero de junio de mil ochocientos treintaiseis, reunidas en la sala del Senado las dos Cámaras que forman el Congreso Nacional, cada una con el número de los miembros prevenidos en la Constitución a saber, la de Senadores, con los señores Tocornal, don Gabriel, Presidente, Barros, Benavente, Elizalde, Elizondo, Eyzaguirre, Echéverz, Gandarillas, Ortúzar, Ovalle, Vial del Rio i Meneses, i la de Diputados con los señores, Martínez, Vice-Presidente, Tocornal don José María, Tocornal don Joaquín, Dávila, Luna, Vidal, Montt, Fierro, Soffia Arriarán, García, Garrido, González, Gutiérrez, Riesco, Carrasco, Toro, Reyes, Gárfias, Arlegui, Eyzaguirre, Moran, Prieto, Valdés, García de la Huerta, Huidobro, Iñiguez, Plata, Irarrázaval, Sotomayor, Barros i Rosales.

Dado aviso a S. E. el Presidente de la República, se presentó en la Sala con el acompañamiento acostumbrado; fué recibido conforme al reglamento i despues de haber tomado su asiento dio al Ministro de Estado en el Deparmento del Interior su Mensaje, que fué leido por dicho señor Ministro i contestado brevemente por el Presidente del Senado, despues de lo cual S. E. el Presidente de la República declaró abiertas las sesiones ordinarias del presente período i se retiró con el mismo acompañamiento, levantándose en seguida la sesión. —Tocornal, Presidente. —Meneses, secretario.


ANEXOS editar

Núm. 1 [1] editar


DISCURSO DEL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA EN LA APERTURA DE LAS CAMARAS LEGISLATIVAS DE 1836.

Conciudadanos del Senado i de la Cámara de Diputados: Al dar principio otra vez al período anual de vuestros trabajos lejislativos, me es grato repetiros mis felicitaciones por la permanencia del órden i por la consolidacion gradual de nuestras instituciones; bienes inestimables, que deben penetrarnos de una profunda gratitud a la Providencia Suprema, que vela sobre los destinos de la Patria.

Seguimos cultivando relaciones de paz i amistad con las naciones de Europa i América; i mediante los principios de justicia i moderación que reglan la política de este Gobierno, me atrevo a esperar que nada las interrumpirá. Recibo pruebas satisfactorias de los sentimientos que animan a las otras nuevas Repúblicas del Continente Americano con respecto a la nuestra, i aunque por ahora nuestras comunicaciones recíprocas no son tan frecuentes ni tan íntimas como parece exijirlo la causa común que nos une, no desconfío que la necesidad de sostenernos i apoyarnos mútuamente se haga sentir cada dia mas i que el Ínteres jeneral bien entendido estreche i anude los vínculos que la naturaleza ha enlazado.

A consecuencia de los últimos sucesos que han ocurrido en el Perú, la ratificación de nuestro tratado con aquella República ha sido declarado de ningún valor por la administración peruana que reemplazó la del Jeneral Salaverry; i la observancia de las disposiciones del tratado quedó limitada al término de cuatro meses que han espirado ya. Desde que se anunció la resolución acordada por el Gobierno peruano de poner fin al tratado, creí de mi deber tomar medidas de precaución para que los privilejios que en él se conceden a la bandera i mercancías del Perú cesasen en Chile, al mismo tiempo que los de nuestra bandera i mercancías en los puertos peruanos.

El estado de la España, destrozada por una guerra civil en que han alternado los desastres i ha parecido muchas veces dudoso el resultado, obligó al Gobierno a suspender la Legación que, con acuerdo de las Cámaras, se propuso enviar al de la Reina de España para el formal reconocimiento de la Independencia de Chile.

A pesar de mis deseos de acelerar la negociación del tratado de amistad, navegación i comercio con la Gran Bretaña, de que os he dado noticia ántes de ahora, se han encontrado en ella dificultades que han ocasionado demoras inevitables.

La Gran Bretaña i el Imperio del Brasil han solicitado la accesión de Chile, por medio de convenciones especiales, a las medidas que éstos i varios otros Estados de Europa i América han tomado de común acuerdo para la represión del detestable tráfico de esclavos; objeto que consagrado por nuestras leyes fundamentales, no puede ménos de hallar una decidida cooperacion en el Congreso, en el Gobierno i en la nación toda.

En el cuadro que os presenté hace un año, del incremento gradual de nuestra agricultura, comercio i artes, nada tengo que rebajar; nada que no confirme las lisonjeras esperanzas que me inspiraba entónces el estado interior de la República. Volved la vista a todas partes, i notareis señales evidentes de que el movimiento que ha recibido la prosperidad nacional se estiende i acelera.

La educación hace progresos no ménos visibles. Los establecimientos públicos i particulares destinados a la instrucción secundaria i científica, siguen dando resultados altamente satisfactorios; i si la enseñanza primaria no se difunde con igual celeridad, ni ha recibido las mejoras de que necesita, no dejareis de recordar las causas que lo embaraza, lo esparcido de la poblacion en muchos departamentos, la pobreza de otras, i la escasez de maestros en casi todos; obstáculos que no es dado remover sino con el trascurso del tiempo.

Se ha llevado a efecto la lei que ordenaba la separación del Seminario Conciliar i del Instituto; providencia tan urjente para dar a la República el número competente de dignos pastores.

La fundación de dos obispados en las estremidades sur i norte de nuestro territorio poblado, es otra medida que las necesidades espirituales de las provincias demandan imperiosamente, i a que creo debe acompañar la erección de metrópoli en Santiago, cuyo rango subalterno en la jerarquía de las iglesias se aviene mal con nuestra Independencia política.

Desde la última Lejislatura no ha cesado el Gobierno de trabajar en la preparación de las leyes orgánicas que han de llenar el voto de la Constitución, completando el edificio político de que en realidad no hemos hecho mas que zanjar los cimientos. Entre ellas merece el primer lugar el reglamento de Administración de Justicia i organización de tribunales. El Consejo de Estado se ocupa constantemente en la revisión de la parte relativa al juicio civil; i gracias al celo de todos sus miembros, i especialmente a la liberal e ilustrada cooperacion de los consejeros majistrados, me lisonjeo de que podré en breve presentaros el resultado de sus asiduas tareas.

La reforma de la lejislacion civil i criminal es otra obra que caminará a la par, i en que, sin apartarme de las reglas fundamentales que trasmitidas por una larga série de jeneraciones se han connaturalizado con nosotros, reglas, ademas, cuya intrínseca justicia i sabiduría son indisputables, me propongo recomendaros innovaciones accidentales que, modeladas sobre las que se han planteado con buen suceso en muchas partes de Europa, servirán para poner a nuestras leyes en armonía consigo mismas i con nuestra forma de Gobierno; i dándoles la simplicidad que les falta harán mas accesible su conocimiento i mas fácil su aplicación. Pero, entre los trabajos orgánicos el que despues de la administración de justicia me ha parecido de mas importancia, es el de los ramos de gobernación i policía, de que se puede decir que no existe sino lo que hemos heredado de España, i que en gran parte es inadaptable al plan constitucional de la República. La Constitución ha creado majistraturas i empleos cuyas funciones necesitan determinarse; i casi no podemos volver la vista a parte alguna donde no salte a los ojos el conflicto de los intereses privados entre sí i con el público; i la necesidad de reglas que los moderen i concierten. Esto abre un campo vastísimo en que tendrá que ocuparse largo tiempo la Lejislatura. La atención del Gobierno se ha dirijido a lo que le parecía pedir con mas instancia la intervención de la lei.

El Ejército adquiere nuevos títulos a la gratitud de la Patria. Los bárbaros que infestaban nuestra frontera han sido repetidas veces escarmentados i obligados a implorar de nuevo la paz. Un parlamento arreglará las condiciones en la próxima primavera.

Se edifican cuarteles para reemplazar lo que destruyó en la provincia de Concepción el terremoto de Febrero del año pasado, i se procura conciliar en ellos, del modo posible, la solidez i comodidad con la severa economía a que nos obliga la situación de las rentas públicas.

La escasez del Erario me ha sujerido la idea de recurrir a la patriótica liberalidad de los habitantes de Chile, para proveer por medio de un empréstito a los gastos forzosos que exije la creación de una pequeña fuerza naval; objeto de esencial Ínteres para la seguridad del pais en su dilatada frontera marítima i en las islas i archipiélagos adyacentes, i para el exacto cumplimiento de las leyes en todo lo relativo al comercio esterior i al de cabotaje. Obtenido un número suficiente de suscriciones se os someterá el plan en todos sus pormenores, i decidiréis sobre su importancia i oportunidad.

En el Departamento de Guerra i Marina se percibe como en los otros el vacío de leyes orgánicas. Las han menester la milicia cívica i la marina mercante. Ambos objetos han exitado la solicitud del Gobierno, i sobre el segundo de ellos se os presentará inmediatamente el proyecto de una lei de navegación, en que se ha procurado tomar de las ordenanzas marítimas de otros Estados las disposiciones mas adaptables al nuestro.

Para que juzgaseis del estado de nuestras rentas i de la perspectiva que ofrecen en lo venidero, sería necesario entrar en particularidades i presentaros datos númericos, que tendrán mejor lugar en la Memoria del Ministro de Hacienda. Me ceñiré a deciros que las rentas han esperimentado un incremento sensible; que han seguido desempeñándose, i que si se llevan a efecto algunas nuevas economías de que me parece susceptible su administración, i si sucesos estraordinarios (que no preveo) no nos obligan a aumentar los gastos del servicio público, irán minorándose progresivamente los empeños que gravitan sobre ellas.

Cuento para esto con un nuevo arreglo del impuesto de sellos, i del de catastro en el que se han tocado inconvenientes que piden pronto remedio. Llamaré también vuestra atención, en el presente período lejislativo, a la consolidacion de la deuda interior, a la nueva planta que creo conveniente dar a la Comision de Cuentas, i a las reformas que contemplo necesarias en el servicio de las oficinas fiscales.

Entre todos los objetos que pertenecen a la hacienda pública, el del empréstito estranjero será el primero que se someta a la deliberación de las Cámaras, a fin de que, si lo estiman conveniente, impartan al Gobierno la necesaria autorización para negociar con los acreedores del Estado la transacion mas equitativa que en nuestra circunstancia sea posible.

Conciudadanos del Senado i de la Cámara de Representantes:

Las Memorias de los Ministros del Despacho añadirán, a esta reseña de las materias de vuestros próximos trabajos, los pormenores de que necesariamente carece. Lo que puedo testificaros es que, en los proyectos de lei que me propongo presentaros, no ha perdonado el Gobierno medio alguno para asegurar el acierto. A vosotros toca mejorarlos, contribuyendo a ello con vuestro imparcial exámen, con el auxilio de vuestras luces i con el asiduo desempeño de vuestras funciones lejislativas. Me atrevo a deciros que pocas veces habrán recaido las deliberaciones del Congreso Chileno sobre asuntos de tan trascendental Ínteres. Partícipes de la responsabilidad del Gobierno, teneis pendiente de vuestros votos, la seguridad del Estado, la eficacia política i moral de las instituciones que nos rijen, la dicha i la gloria de la Patria. —Santiago, Junio 1.° de 1836. —Joaquín Prieto.


Núm. 2 [2] editar

El Presidente de la República, acompañado de las corporaciones i del cuerpo diplomático, se dirijió el miércoles 1.° de Junio, a las 11 de la mañana, a la sala del Senado, i allí, en presencia de ámbas Cámaras i de un inmenso concurso, el señor Ministro del Interior leyó el discurso de S. E., que llenó de júbilo i esperanza a los representantes de la Nación. Concluida esta lectura, S. E. declaró abierta la sesión de nuestro Cuerpo Lejislativo. El Presidente del Senado contestó brevemente i de un modo bastante satisfactorio al discurso de S. E.

Es, sin duda, bastante estraña la costumbre que se ha introducido entre nosotros de que el Presidente del Senado conteste por sí al discurso de apertura que pronuncia el Presidente de la República, haciéndose de este modo intérprete de la voluntad de ámbas Cámaras. El discurso del Presidente del Senado no puede espresar mas que la voluntad i deseos del Senador; mas no la voluntad i deseos de los representantes del pueblo, que ninguna parte han tenido en esta contestación. Sería, pues, bueno que se adoptase en Chile la práctica que, sobre este particular, está en boga en los Cuerpos Lejislativos de Inglaterra i Francia, donde la contestación que se envía al Rei es obra de ámbas Cámaras, las cuales entran muchas veces en largas i serias discusiones, sobre el modo con que se ha de contestar a cada uno de los puntos principales que contiene su discurso.


  1. Este discurso ha sido tomado del periódico El Araucano número 300, correspondiente al 3 de Junio de 1836. —(Nota del Recopilador.)
  2. Este artículo ha sido tomado del periódico El Araucano, número 300, correspondiente al 3 de Junio de 1836. —(Nota del Recopilador.)