MORA, DON JOSÉ JOAQUIN. editar

Por Montealegre, provincia de Albacete.


Siempre ha tenido pretensiones de buen economista, pero en el Congreso no ha lucido sus conocimientos. La primera y única vez que quiso hablar no se lo permitieron los murmullos y risotadas de los señores diputados; y fué grande lástima que sofocaran su voz, porque estaba empezando á explicarles cómo se deben pedir y obtener audiencias de los señores ministros. En esto no hay duda de que S. S. debe tener mucha práctica, porque es perro viejo: como quiera que sea, el orador hizo fiasco completo.

En todas circunstancias solo ha necesitado que Dios lo envíe donde haya de qué, pues S. S. sabe perfectamente inventar cómo.

Con la vice-presidencia del Consejo provincial de Madrid, con algunas habilitaciones para ir á Londres comisionado por el gobierno, y con otras interinidades y actos preparatorios ha estado S. S. dejando madurar la breva, hasta que al fin maduró bien, y ha sido nombrado cónsul de España en Londres para cuyo destino salió S. S. hace días dejando muchas memorias para los electores de la provincia de Albacete.

Usa una gran peluca gris, de la que penden tantos rizos como serpientes pendían de la cabeza de Medusa.