MATA Y ALOS, DON FRANCISCO.

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Por Lérida.


Aquí tenemos un ejemplo notable del movimiento continuo en que está el mayor número de los representantes del pueblo.

Era brigadier y secretario de la Inspección de infantería, fué á la expedición de Portugal y le valió el ascenso de mariscal de campo en agosto de 1847, por lo que dejó de ser diputado. En 15 de diciembre del mismo año presentó nuevos poderes y tomó asiento segunda vez. En 14 de setiembre de 1848 fué destinado á Cataluña con 60,000 reales de sueldo y el Congreso lo declaró nuevamente sujeto á reelección. En 14 de abril de 1849 se presentó por tercera vez con nuevos poderes constando que S. S. fué elegido por unanimidad. ¡Qué electores tan beneméritos! Ya se ve, á fuerza de tanto elegir y ejercitar su derecho hay muchos distritos en España donde los electores han adquirido tal costumbre de votar que votan hasta durmiendo.

Este señor diputado sostuvo en la primera legislatura algún fuego graneado con el señor ministro de la Guerra, y lo puso en buenos aprietos; pero al fin capitularon, como era de esperar, y no han roto más las hostilidades.

Tiene aspecto militar, y como jefe de Estado Mayor del general don Manuel de la Concha trabajó con actividad para pacificar á Cataluña.