Rocío
de Gabriela Mistral
Esta era una rosa
llena de rocío:
éste era mi pecho
con el hijo mío.

Junta sus hojitas
para sostenerlo:
esquiva la brisa
por no desprenderlo.

Descendió una noche
desde el cielo inmenso;
y del amor tiene
su aliento suspenso.

De dicha se queda
callada, callada:
no hay rosa entre rosas
más maravillada.

Esta era una rosa
llena de rocío:
éste era mi pecho
con el hijo mío.