Revista de la semana del No. 5, 1869

El Museo Universal (1869)
Revista de la semana del No. 5, 1869
de Nicolás Díaz de Benjumea
REVISTA DE LA SEMANA.

E

l discurso imperial continúa siendo la materia de interpretaciones, comentos y congeturas en loila la prensa estranjera, pues aunque dirigido sólo á la Francia, está hecho para que lo entienda o procure entenderlo ludo el inundo civilizado. Estraña debe ser la situación del vecino reino,cuando se ha acostumbrado á que de vez en cuando suba á la tribuna su universal delegado y empresario general de sus pensamientos, palabras y obras, y en un discurso afiligranado con frases diplomáticas que suenan mucho y no dicen nada, repita el panegírico del Imperio y de los grandes beneficios que ha hecho y piensa seguir haciendo. Los que de lejos ven la función, se encogen de hombros y dan gracias á Dios de ver á los franceses tan entretenidos y contentos con su situación interior; pero nosotros y las demás naciones que no tenemos por qué tragar sin previo exámen la imperial pildora, naturalmente queremos desliar los globulillos y ver si hay dentro escrito el nombre de lrusia ó Alemania. Ni una palabra. En su lugar no hay mas que bocanadas de poderío y empeño en mostrar al mundo que la Francia, como diría un portugués, recenta de forte. Sea enhorabuena, pero el punto principal queda oscuro, y hablar mucho de paces, sin mentar siquiera á los vecinos con quienes hay peligro de entrar en guerra, no es cosa muy satisfactoria. Por de pronto nos podemos fiar al menos en que habrá tres semanas de armisticio entre turcos y griegos. La insurrección de Creta parece también que puede darse por terminada, y si después de la tregua comienzan las hostilidades de nuevo, y alguno de los beligerantes logra una victoria, por pequeña que sea, es probable que se quede satisfecho, porque pensar que Turquía haya de estender sus conquistas, ó que Grecia se haya de trasformar ahora en un imperio helénico, es pensar en lo escusado. Un telegrama dirigido á la legación del Brasil en Londres, anuncia haber concluido la guerra entre este: imperio y el Paraguay, cuyas tropas fueron completamente derrotadas en Villeta el 11 de diciembre último, hechos 3,000 prisioneros, y obligado el presidente López á apelar á la fuga con el insignificante resto de 200 nombres. Sabido es une esta guerra se originó por una contienda entre el gobierno brasileño y el dictador del 1 Paraguay sobre influencia en el Uruguay, y la perseveranda y firmeza con que en el Brasil ha llevado adelante esta empresa costosa y al parecer inútil, no sór1 prende menos que el éxito obtenido. Sin embargo,! bueno fuera que este imperio, bastante estenso, se | persuadiese de que guerras de conquista no convienen ya á ningún Estado, ni en Europa ni en América. ¡ Sábese ya, y no deja de ser importante la noticia, que el presidente de la República de los EstadosUnidos ha enviado al Senado el convenio hecho con la Gran Bretaña para la ventilación y decisión de las reclamaciones sobre Alabama. También es interesante la nueva de que los representantes en Washington han 1 rechazado la proposición presentada por un diputado, para que Haití y Santo Domingo fuesen puestos bajo el protectorado de la Union. Se conoce que esta república no quiere por ahora cuidados ágenos, ni consentiría tampoco que se llevase ;i efecto el plan que se atribuye á un general mejicano, y del cual se fia hablado mucho en los pasados dias: plan que consiste en formar un ejército para una espedicion á Méjico, á cuya cabeza se pondría Santa Ana, y cuyo objeto seria poner otro principe en el trono que cayó con Maximiliano. Tanto el proyecto como los medios con i que se dice que cuenta este partido, nos parecen demasiado fabulosos, y fuera de lugar y tiempo. I El rimesha publicedo recientemente un notable articulo de fondo sobre la cuestión de Gibraltar, con motivo de la carta que escribió el almirante Sulivau, abogando por la cesión de la plaza y su compensación con la de Ceuta. Comienza dando á entender cierto resentimiento deque los españoles no hayan preferido cultivar lasrelaciones con Inglaterra mas bien que con otras potencias, ni se muestren dispuestas siquiera á hacer algún sacrificio en su obsequio, ahora que tenemos un trono vacante y no pocas dificultades para llenarlo. Esto, en lenguaje vulgar, quiere decir que no hay razón para que lnglalerra nos ceda Gibraltar, ya que no nos acordamos del duque de Edimburgo. Por lo tanto, no pndiendo entendernos en materia de obsequios mútuos., el periódico inglés pasa á examinar si Ceuta ó Gibraltar conviene mas á sus intereses. . . Desde que existen buques, blindados y teniendo los ingleses la India, necesitan estaciones navales á intervalos. La cuestión versa sobre si Ceuta puede sustituir á Gibraltar y si Inglaterra consentiría en dar este puerto cual lo tienen, y tomar en cambio el otro en el estado en que se halla. Ahora bien, según el cálculo del citado almirante, se necesitarán cinco años y gastar ciento cincuenta millones de reales para hacer de Ceuta una fortificación equivalente. Resultado, que al parecer de este periódico, puesta aparte la cuestión de gastos, no tendría inconveniente Inglaterra en cedernos Gibraltar. Al (¡n, se acabó el hacer alarde de supuestos derechos, y el caso ha venido á reducirse á lo que se reducen todas las cuestiones por esta nación: á cuestión de ochavos. Los experimentos de la bala explosiva Palmer de que hemos hablado en una de las anteriores revistas, se verificaron el 21 en el campo-escuela de Shoeburyness; pero á causa de no ser apropiadas para la bala Palmer las espoletas que usa el ejército, se decidió construirlas á propósito y fijar otro dia para el ensayo. Parece que el mérito endiablado de este nuevo proyectil, es el tener efecto retro-activo: es decir, que ya son inútiles las trincheras, barricadas, murallas, parapetos y basta las famosas baterías llamadas Moncreifl, porque el proyectil Palmer arroja sus fragmentos sobre los que se hallan guarecidos en ellas, y lo mismo da pelear tras de parapetos como en campo abierto, porque el proyectil obra cual sí atacara por la espalda. Dícese, y nos alegraríamos que la noticia se coutirmase, que se ha presentado al señor ministro de Fomento, una Memoria suscrita por cuatro casas importantes de Inglaterra, proponiendo invertir en España 2,000.000,000 de reales en canales de riego, con condiciones aceptables, puesto que no se exigen privilegios ni el Estado tendrá que sufrir menoscabo en sus intereses. Si es todo oro lo que reluce, el ministro de Fomento, que ciertamente es de los Horneros que menos dormitan, no desaprovechará tan apetitosa oferta, porque faltan verdaderamente en España esos elementos tan útiles y beneficiosos, y sobran en el señor Ruiz Zorrilla los deseos de acometer todo género de reformas y adelantos. Digalo sinó el reciente decreto sobre las escuelas de primeras letras, que se hallaban ¡con corta diferencia como á principios del siglo, y eran, en la mayoría de los pueblos, ya un patio ó corral, ya un portal mísero, espuestos á los incómodos de los elementos, y sin mas adeliño que unos cartones viejos, mesas desvencijadas, un crucifijo estropeado, ó alguna imágen de pecador artista colgada de una pared sucia y ruinosa. De enhorabuena deben estar los padres de familia al ver que se trata de remediar tanto defecto y abandono y construir escuelas públicas según planos adaptables á las condiciones de cada pueblo, estableciendo premios para los hombres de ciencia ó de arte que trabajen por dotar á las escuelas públicas de los medios materiales de enseñanza. Sin embargo, nosotros que elogiamos estos pasos que se dan en la buena senda, no debemos dejar de advertir, que lo dificultoso no es mandar, sino hacer que lo mandado se egecute. Vemos grandes y verdaderos intentos de elevar en nuestro suelo la enseñanza al grado que corresponde en una nación libre y civilizada ; pero no es posible dejar de notar diferencia entre los preámbulos magníficos de los decretos, y muchos de sus articulados, y entre la actividad de las órdenes y la lentitud de la egecucion. Nos referimos especialmente á la Universidad, y á la contradicción, que, por ventura, existe entre el preámbulo sobre libertad de enseñanza y los artículos que acompañaron á ese famoso y celebrado decreto, que son ni mas ni menos que la ley Moyano, la mas centralizadora y moderada, en una palabra, eidelirium tremensen materia de enseñanza. Ello es, que la Universidad se halla en situación de no saber qué leyes están vigentes y cuáles no, y convendría que cesase esta confusión. Por fin, los maestros y profesores de música han adelantado á los escritores en punto á llevar á cabo una asociación de protección mutua y de fomento de su arte en España. Nosotros desearíamos que los literatos, ya que tienen libertad para asociarse, se reuniesen y fundasen esas corporaciones tan beneficiosas y de que tanto número existe en las naciones de Europa, en la inteligencia de que libertad significa valerse cada cual de sus fuerzas, v no esperar á que venga el cuervo de San Pablo. Ya que debamos decir algo sobre la circular y decreto que tanta agitación causaron en estos dias, y que produjo el acontecimiento trislisimo que todos deploramas, nos atreveríamos á indicar nuestra opinión de que pura completar el pensamiento del gobierno, habría que proveer á la traslación ó colocación en lugares más accesibles de ciertos archivos célebres de España, que hoy dia no son tesoro mas que para ciertas personas bien acomodadas y en lo general para extranjeros. El archivo de Simancas, por ejemplo, es como si no existiese, porque no se puede exigir que un hombre estudioso tenga los medios necesarios para encarcelarse por dos ó tres años en un pueblo, con el sólo objeto de ser útil á las ciencias, la historia ó la literatura de la patria, rii todos gozan de las pensiones espléndidas que tienen los extranjeros investigadores de sus recónditas riquezas. El resultado es, que otros son los que alcanzan la fama y gozan de lo que debiera correspondemos. •


Nicolás Díaz Benjumea.