Rescripto Imperial sobre la Educación


Sabed, súbditos Nuestros:

que Nuestros Ancestros Imperiales han fundado Nuestro Imperio sobre unos amplios y eternos cimientos y que han implantado firmemente la virtud; y que Nuestros súbditos han ilustrado la belleza de ésta de generación en generación, unidos en lealtad y piedad filial. Esta es la gloria del carácter fundamental de Nuestro Imperio, y es también ella la fuente de Nuestra educación.

Súbditos Nuestros, sed fieles a vuestros padres, afectivos con vuestros hermanos y hermanas; como maridos y esposas armoniosos, y como amigos leales; guardaos en la modestia y la moderación; ilustraos y cultivad las artes, para así tener facultades intelectuales y una moral perfecta y poderosa; avanzad asimismo en el bien general y promoved los intereses comunes; respetad siempre la Constitución y cumplid las leyes; ofreceos con coraje al Estado de surgir la emergencia; y por tanto guardad y mantened la prosperidad de Nuestro Trono Imperial así en la tierra como en el cielo.

No debéis ser por tanto sólo Nuestros buenos y fieles súbditos, sino que también debéis ilustrar los mejores usos de vuestros antepasados. El Camino aquí marcado es en verdad la enseñanza legada por Nuestros Ancestros Imperiales para ser guardada por Sus Descendientes y sus súbditos, infalible en todas las eras y verdadera en todos los lugares. Es Nuestro deseo portarla en nuestro corazón con gran respeto, para que así, en común con vosotros, Nuestros súbditos, sigamos la misma virtud.

El día trigésimo del décimo mes del año vigesimotercero Meiji.
(Rúbrica y sello imperial).