Relato de Francisco Antonio Encina sobre Fernando Errázuriz Aldunate
La figura de don Fernando Errázuriz, por injusto que haya sido el juicio del sectarismo, tiene relieves de prócer y se acrecienta con la distancia. Puede ser que de cierta altanería de carácter, reflejo inconsciente de superioridad, y su inmensa fortuna; crimen que no se perdona; hayan nublado sus bellas condiciones despertando la envidia de almas mezquinas, pero su vida rectilínea de luchador infatigable, noble y magnánimo, es un alto ejemplo de civismo que lo enaltece y hace honor a su estirpe.